El municipio ourensano de Rubiá está situado en la parte nororiental de la provincia de Ourense. Pertenece a la comarca de Valdeorras y a la diócesis de Astorga. Tiene diez parroquias. Limítrofe con la provincia de León.

No tiene monumentos especialmente significativos y por tanto ningún monumento nacional. Si bien es importante su oferta de naturaleza y paisajística, sobre todo con la Serra da Lastra, (Parque Natural oficialmente reconocido) con bosques de encinas, sotos. El cañón, formado por el río Sil, hábitat y refugio ornitológico de aves de rapiña en las “palas” (simas que se forman por la especial composición de la roca madre). Los ríos Meiral y Galir son afluentes del Sil. Las alturas más sobresalientes son los picos de As Tres Penas Marías (1268 m) o Piornal (1528 m.) y el Portelo da Tara (1099 m). La comunicación es fácil desde la N-120. De Ourense dista 118 kilómetros. En Quereño, estación de ferrocarril.

La puesta en valor del llamado Camino de Invierno a Santiago introduce las tierras del concello en la oferta jacobea.

La población es muy escasa en la casi totalidad de las parroquias, lo cual también se traduce en una gran parte de las edificaciones abandonadas o ruinosas.

Patrimonio arqueológico

El propio nombre de Rubiá se relaciona con una divinidad indígena local, Revveana Bareco, lo que evidencia una cierta importancia en época antigua. LaVía Nova o Vía XVIII, se hace presente como elemento arqueológico más destacado. Rubiá, Robledo da Lastra y Oulego son puntos ciertos de paso de esta vía que unía Braga con Astorga, partiendo de Oulego otra vía secundaria. A ponte da Regueiral debió tener precedentes romanos vinculados con la vía. Hay algún resto megalítico (Castro de Pardellán, Castro de Cabeza), pero sobre todo es la etapa romana la más destacada se contrapone el marcado carácter de la romanización. En las Cuevas de la Serra da Lastra se han realizado prospecciones arqueológicas con resultados interesantes. Se han rehabilitado algunos tramos de la Vía Nova, como el del paraje denominado Penedos de Oulego, por encima de la carretera OU-622.

Patrimonio artístico

Barrio y Castelo (A Asunción). Iglesia de sencilla construcción del siglo XVIII con reformas posteriores. Espadaña a los pies. Retablo mayor barroco con columnas salomónicas. El sagrario de un retablo anterior del siglo XVII. Hay una capilla dedicada a San Tirso.

Biobra (San Miguel). Iglesia del siglo XVIII, de planta cuadrada y espadaña a los pies, muy sencilla. Interesante conjunto de retablos y tallas. El mayor barroco, con la imagen de san Miguel, con sagrario manierista con la verónica en la Puerta, obra del escultor manierista astorgano Gregorio Español.El retablo del Santo Cristo del siglo XVII, con una magnífica talla del crucificado. El de Santa Bárbara, del siglo XVIII, y el retablo del Rosario, del siglo XVII, con pinturas de Jerónimo de Salazar y una deliciosa talla de San Antonio Abad de pequeño tamaño, también obra de Español.

Covas (San Salvador). Iglesia sencilla de planta cuadrada y espadaña. Retablo del siglo XVIII. Imagen de San Roque barroca, donada por una parroquia de Astorga para sustituir a otra robada.

Oulego (San Miguel). Iglesia del siglo XVIII. Retablo mayor del siglo XVII reformado y degradado en el XIX. Imágenes barrocas populares de San Miguel, San Sebastián, Santa Bárbara y Santa Lucía. Retablo e imagen de la Virgen del Carmen del siglo XVIII.

Pardollán (Santo Estevo). Iglesia hoy abandonada con restos de un románico popular y tardío como lo atestigua el arco de triunfo apuntado y el perfil de las impostas sobre las que se eleva la bóveda con un bocel muy desarrollado. De una sola nave. En el muro sur, hay una puerta románica de arco de medio punto abocinado y sobre el jambaje exterior, a modo de arquivolta, se observa un arco con ligera traza de herradura. El tímpano esta sostenido por mochetas sobre las jambas que presentan dos cabezas de animales iguales. Sobre el tímpano hay dos arquivoltas de arista viva. Sobre el tejado y aleros de la torre central hay canecillos con motivos ornamentales diferentes. El arco triunfal apuntado es lo más sobresaliente de su interior, donde todavía quedan restos de la antigua cubrición de madera con curiosos modillones tallados. La antigua ermita de Santo Tomás, situada al sureste de la población, prácticamente desaparecida y sus restos ocultos por la maleza, ha sido objeto de recuperación histórica por los vecinos.

Porto (San Cristovo). La iglesia construcción en ladrillo con torre cuadrada del siglo XX, sin especial interés. Tallas barrocas de arte popular y otras de producción industrial.

Quereño (San Cristovo). Iglesia de mampostería encalada, con espadaña a los pies, capilla mayor realzada. Las portadas de medio punto de cantería. Siglo XVIII. Tallas y retablos de arte popular. La central hidroeléctrica sobre el Sil, es interesante dentro de las construcciones de tipo industrial, que tienen interés patrimonial y algunas construcciones relacionadas con el ferrocarril.

O Robledo da Lastra (Santa María). Iglesia muy sencilla y rural. Retablo de la Anunciación del siglo XVIII con imagen de la Virgen con el ángel de estilo barroco.

Rubiá (Santa Mariña). La capital municipal conserva un interesante conjunto de casas dispuestas en la llamada calle de la Iglesia, que tiene interés y sabor, entre ellas la casa grande los Caneda, con empaque de pazo y construida en el siglo XVIII. En ella nació el historiador Ramón López Caneda. La iglesia parroquial de tres naves con espadaña a los pies, cubierta de madera. Retablo mayor barroco, con imágenes de los Apóstoles de estilo manierista y provenientes de un retablo anterior, repintados. Conjunto de retablos e imágenes de interés entre los que destaca en un lateral pequeño retablo manierista de la Magdalena. Cruz procesional de plata del siglo XVII interesante como el incensario y la naveta de plata. En la sacristía cajonería barroca.A las afueras del pueblo, ermita de Nuestra Señora del Camino con imagen de la Virgen sedente del siglo XVI.

El Belenismo tiene en Rubiá una cita permanente por el cuidado y curioso nacimiento con figuras en movimiento.

A Veiga de Cascallá (Santa Cruz). La iglesia es un interesante ejemplar de arquitectura barroca de buena cantería con cúpula en el crucero y torre de planta cuadrada. Se trasladó desde el pueblo de Alberguería (A Veiga), al ser anegado por las aguas. En el interior, una imagen del Crucificado del siglo XVIII, pero malamente repintada. La antigua iglesia, en el centro del pueblo, se derribó para agrandar la plaza.

Conservan los pueblos del municipio abundantes muestras de arquitectura popular en la mayor parte, en alto grado de deterioro. Es muy interesante el molino situado detrás de la iglesia de San Estevo, en Pardollán, tiene dos singularidades que merece la pena reseñar: la utilización del agua del cercano manantial subterráneo, probablemente de origen cárstico, y no de un río ó arroyo con suficiente caudal como es lo habitual, y la existencia de un banzao circular -poco común por sus dificultades constructivas- que además aprovecha parte de la roca como elemento de cierre. En Veiga de Cascallá hay una casa de labranza con horno.

El calendario festivo es pródigo en celebraciones, destacando las fiestas patronales de la Ascensión (mayo) -que reemplazó la festividad de Santa Marina (18 julio), patrona de Rubiá, pues en esa fecha los hombres estaban en las siegas en Castilla,, y San Bartolomé (24 de agosto). En Oulego celebran el Carmen y San Miguel (julio y septiembre); San Cristóbal (julio) en Quereño. Corpus Christi (junio) en O Porto y Sto. Toribio en Robledo de Lastra (abril). En Biobra tiene lugar en el mes de julio la Romería de Poulo do Couso, con juego de bolos.

Hay algunas casas de turismo rural y la gastronomía es de buenos productos. Los vinos de Rubiá destacan por la personalidad que le aportan los suelos calizos que allí son predominantes. En la aldea de O Val hay un típico barrio de Covas donde anualmente le rinden homenaje a los vinos durante una popular fiesta.

(*) Director del archivo diocesano