¡Vaiche boa, Castelao! ¿Qué es lo que hace una federación vecinal cubriendo las vergüenzas del gobierno municipal y poniendo en solfa una protesta ciudadana, aunque le resulte ajena? Ahí está El Meollo de la cuestión.
¡Ay Castelao, quién te ha visto y quien te ve! Ayer punta de lanza del ciclón vecinal más fuerte y reivindicativo que ha conocido esta ciudad, con el 5-J enterrado en el olvido, y hoy correa de transmisión del equipo de gobierno del BNG, y avalista vergonzante del cierre irracional de la avenida Reina Victoria, con el pecado original de un burdo engaño a cuestas
Muy mal debe estar viendo la marcha de este asunto el alcalde Miguel F. Lores, y su lugarteniente Demetrio Gómez, como para forzar su bochornosa comparecencia junto a la Federación de Asociaciones de Vecinos Castelao, para apadrinar la peatonalización cuestionada.
Castelao perdió el norte hace mucho tiempo, desde que su primer presidente, Ramón Pazos, dejó de serlo, imagino qué cansado de aguantar al personal y viendo la que se avecinaba. Desde entonces, todo ha ido de mal en peor, hasta convertirse en una mala caricatura de lo que fue y significó.
Juan Manuel Loureiro Taibo, actual presidente de la mentada federación vecinal, se pronunció hace nueve meses contra el cierre de Reina Victoria por considerarlo injustificado, si bien reservó su postura definitiva hasta conocer a fondo el proyecto barajado. Y ahora excusa su bendición en aras de la nueva Ley del Cambio Climático y del modelo de ciudad, ya tocado por una divina infalibilidad. ¡Vaiche boa, Castelao!
Un amigo mío que presume de buen observador del pulso local, asegura que el affaire Reina Victoria le costaría ahora mismo al BNG uno o incluso dos concejales. De la antigua Salvador Moreno para abajo, dice que todos están en contra. De ahí vendría esa inquietud mostrada por la bancada nacionalista.
No voy a ser yo quien contradiga a mi amigo analista. Pero sí añado qué Rafa Domínguez ya debería estar firmando ante notario el compromiso de reponer la avenida a su función original, caso de acceder a la alcaldía.
A cuenta de ese sinsentido que de un tiempo a esta parte tanto viene trastocando el callejero pontevedrés, no resultaría nada extraño que el cierre de Reina Victoria traiga consigo para no dejar ni rastro, incluso la pérdida del nombre de la esposa del Rey Alfonso XIII, que en gloria esté.
