La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 2022 como Año Internacional de la pesca y la acuicultura artesanales. Con este motivo, Naciones Unidas ha organizado un acto de lanzamiento mediático de este Año Internacional el 19 de noviembre de este año 2021.

No existe una definición precisa mundialmente aceptada sobre el significado exacto de “pesca artesanal” ni de “pesca a pequeña escala”, aunque comúnmente estos términos se utilizan para describir la pesca y la acuicultura que utiliza unidades de producción relativamente pequeñas (por ejemplo, barcos de menos de 12 m de eslora en la Unión Europea), con poca producción y niveles bajos de tecnología o inversión de capital. Se excluyen tanto la pesca deportiva como la recreativa.

El objetivo para la celebración de este “Año Internacional” es doble. Por un lado, llamar la atención del mundo sobre la función de los pescadores, acuicultores y demás trabajadores de la pesca en la seguridad alimentaria y la nutrición, la erradicación de la pobreza y el uso sostenible de los recursos naturales, con lo que se pretende aumentar la conciencia mundial y las acciones necesarias para darles apoyo.

Por otro lado, también pretende mejorar el dialogo entre diferentes interesados y fortalecer la asociación de los pequeños productores entre sí para conseguir una mayor visibilidad y que puedan ser escuchados adecuadamente e incluidos en los procesos de toma de decisiones que les afectan.

Es muy curioso. Cuando se habla de pesca y acuicultura se suele pensar en la gran pesca y la gran acuicultura, los grandes barcos, las grandes capturas y las grandes instalaciones de cultivos marinos, pero muchas veces uno no es consciente de que la mayor parte de los trabajadores del mar son pescadores artesanales o pescadores a pequeña escala. Según el Banco Mundial, en el mundo se dedican a la pesca, directa o indirectamente, unos 120 millones de personas. De ellas, aproximadamente un 90 % son trabajadores de la pesca artesanal o a pequeña escala (unos 108 millones de personas) y de ellos el 50% son mujeres (54 millones de mujeres). Esto da idea de la importancia de la pesca artesanal y de pequeña escala en el mundo. Y es preciso recordar que en muchos países en vías de desarrollo este tipo de pesca es fundamental en su alimentación y economía.

Pero, incluso de manera más cercana, en Galicia, gran potencia pesquera, los datos también son muy llamativos. Por ejemplo, de los aproximadamente 4.500 barcos de pesca que tenemos en Galicia, curiosamente, el 90% son de pesca artesanal. Semiartesanal es la mayor parte de la acuicultura y muy artesanal es el marisqueo.

Cuando hablamos de empleo, los datos en Galicia también son muy llamativos. Del total de los aproximadamente 20.000 empleos directos del sector pesquero gallego, aproximadamente el 90% proceden de la pesca artesanal, la acuicultura y el marisqueo.

La participación directa de la mujer en el mundo pesquero, acuicultor y marisquero de Galicia es más que notable. Aunque en la pesca su participación es menor, es muy importante en la acuicultura. En el marisqueo el 82% de los trabajadores son mujeres. Y en el sector transformador, fábricas de conservas y similares, aproximadamente el 80% del empleo es femenino.

Todo esto nos da idea del fuerte componente artesanal de la pesca, acuicultura y marisqueo en Galicia. Y de la enorme participación de las mujeres en el sector. Por ello, nos toca muy de cerca la celebración en 2022 del Año Internacional de la pesca y la acuicultura artesanales y los objetivos que persigue. Contribuyamos todos, cada uno en la medida que podamos, al éxito de este importante Año Internacional promovido por Naciones Unidas.

*Instituto de Estudios Vigueses