Acabamos de celebrar un atípico día de San Miguel, patrono de las gentes de mar, por culpa de esta maldita pandemia que nos tiene presos de su tiranía, y no nos permite celebrar nuestras fiestas más genuinas. Eso sí, celebramos los actos religiosos con la misa cantada y la colocación del ramo de flores en el monumento a los danzantes de su "Danza das Espadas" tradicional, y por parte del ayuntamiento la colocación de una serie de pasquines con fotografías de la Danza das Espadas, así como los tres cubos en los jardines "Rosalía de Castro", donde se repasa la historia de la fiesta de San Miguel y su danza con engalanado de la villa, para que, al menos, pud iéramos decir que celebramos el día de San Miguel. La Fiesta de San Miguel que fue ganando interés entre los marinenses, que allá por mediados del siglo pasado, casi se habían olvidado, gracias a un puñado de marinenses, que machaconamente. Fueron consiguiendo que calara entre toda la población. De manos de la "A.C.A. Santa Cecilia". Hasta conseguir llevarla a la situación que hoy afortunadamente se encuentra: "Fiesta de Interés Turístico de Galicia".
Y como dice el refrán: "de bien nacidos es ser agradecidos", queremos agradecer a todos aquellos que de una u otra manera colaboraron a lo largo de todo este tiempo a que nuestra fiesta por excelencia, llegara a donde hoy se encuentra. Desde los danzantes, los directores, los directivos, etc., hasta todos aquellos que desde los medios de comunicación animaron, apoyaron y difundieron su continuación. Y entre ellos, no podemos olvidarnos de un marinense, enamorado de nuestra villa, dedicó todo su tiempo libre a estudiar y recopilar nuestra historia, por la que hoy, todo marinense puede conocer y estudiar e investigar en ella, nos referimos al don José Torres Martínez, que con su libro "Pequeña Historia de Marín", nos dejó un legado muy valioso para que podamos comprender nuestra andadura por la historia, recuperar y mantener nuestras tradiciones, solicitando la creación de un Patronato de San Miguel, propuesta que fue recogida por la "A,CV.AS. Santa Cecilia", de manos de su presidente Carlos Martínez Arias, para preservar e impulsar nuestra más antigua y característica fiesta marinera, con la creación del hoy "Padroado de San Miguel". Así el historiador José Torres decía en un artículo publicado en "El Pueblo Gallego" del 14 de octubre de 1962, titulado: "Marín: Ante un olvido imperdonable. ¡¡Viva San Miguel!", en la que decía: "Una vez más la tradición ha sido despreciada. La general indiferencia ha puesto de manifiesto el triste hecho del creciente desapego hacia nuestras más antiguas y arraigadas celebraciones. La fiesta de San Miguel concretamente, en otros tiempos tan popular que sobrepasaba en brillantez y emotividad a toda otra efemérides festival local, ha pasado este año casi total ente desapercibida y parece ya en trance crítico de desaparecer?.pero no se trata de hablar ni de escribir, sino de adoptar la acción inmediata y oportuna para rehabilitar esta celebración de San Miguel y sostener su Daza de Espadas, proponemos a los marinenses los siguientes puntos de acción:
1.-Constituir- que será realmente tan solo restaurar-la Cofradía de San Miguel, encargada de sostener y propagar la milenaria devoción popular AL Glorioso Arcángel. 2.- Tutelar la agrupación de la Danza de Espadas, dotándola de una organización efectiva y permanente, según los más estrictos cánones tradicionales, en su doble aspecto de expresión profana de culto y manifestación típica de folklore local. 3.- Trabajar por la declaración de patrón del municipio en favor de San Miguel y considerar su celebración del día 29 de septiembre como fiesta oficial en todo el término municipal. Que el jubiloso grito de "Viva San Miguel" atronando en otros tiempos a lo largo de las calles de la villa en las voces roncas de fervor y emociones de nuestros marineros, resuene hoy en las conciencias de los marinenses, urgiéndoles a sumarse a nuesra iniciativa".
Y por eso hoy queremos gritar, más fuerte que nunca ¡¡¡VIVA SAN MIGUEL!!!
