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tRIBUNA LIBRE

Un año escolar excepcional

Para evitar que nuestros pequeños pierdan un año escolar, creo que el Ministerio de Educación y las diferentes consejerías de educación deberían adoptar medicadas en defensa de la educación de los niños españoles. Haciendo del año 2020, un año excepcional y que por motivos de la pandemia el curso escolar debería ser prolongado aquellos meses que los niños se han ausentado de las clases presenciales. Más vale perder un verano de playa pero que los niños no pierdan su curso habitual.

Dando por hecho que es imposible que los niños acudan a clase hasta el mes de junio de 2020, perdiendo por tanto los meses de marzo, abril, mayo y junio. El curso podría continuarse a partir de julio, durante los meses de julio, agosto, septiembre y octubre de 2020. Haciendo el descanso en noviembre y diciembre e iniciando el nuevo curso escolar 2020-2021 en enero y terminando en octubre de 2021.

Haríamos práctica durante dos o tres años del proyecto abortado en su día del ministro de Educación de España Julio Rodríguez que en 1973 intentó un calendario universitario llamado calendario Juliano en donde los cursos académicos se iniciaban en enero. Creo que es una buena idea, pensando que la educación al igual que la sanidad es lo primero para nuestros escolares.

*Médico de familia y traumatólogo, vecino de Manduas (Silleda)

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