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desde mi atalaya

Manuel Torres

Linajes marinenses

Marín, como cualquier otra villa o ciudad con historia, y nuestra villa tiene más de nueve siglos de historia, desde 1112, en que los monjes de Osera se instalaron con el Priorato, que fue el germen del desarrollo y crecimiento de un pueblo marinero como el nuestro. Y por lo tanto Marín, también tiene familias, que fueron conformando nuestro modo de ser, no solo en nuestro territorio sino más allá, en las tierras de ultramar, que fueron descubiertas por el navegante pontevedrés Cristóbal Colon en 1942.

Por eso empezaremos por un linaje de gran arraigo en nuestra villa, y sobre todo con una importante participación en las Indias, nos referimos a los Blanco Cicerón, con el que el historiador José Torres Martínez, abre su libro "Marinenses en el tiempo", y que lo califica como: "Un magistrado en las Indias". Hagamos un rápido repaso por su historia.

Dicen, los historiadores, que el linaje Blanco, proviene de las montañas leonesas, en la frontera con Asturias, y su antigüedad se remonta al siglo XIII, y que se extendieron por León. Asturias, Galicia, Castilla y Vascongadas, fundando nuevos asientos y que más tarde se trasladaron a América. En Galicia se instalaron en Junquera de Ambia (Allariz), Orense, y en el primer tercio del siglo XVII, descendientes de esta casa se asentaron en Santa Alarma de Sobrado del Obispo, en el partido judicial de Orense.

Y de esa familia de cinco hijos, el quinto José Francisco Blanco Salgado, bautizado el día 2º de octubre de 1712 en Santa María de Sobrado, caudillo de la gente del Partido de Sotomayor y Alcalde Mayor de la feligresía, que se casó el 10 de abril de 1739 con la hija de hidalga familia marinense, doña Rosa Isabel Cicerón Centeno, en la iglesia de San Xiao del Puerto de Marín, y tuvieron cuatro hijos, el padre José Francisco falleció en Marín, siendo sepultado en la capilla mayor de la iglesia parroquial el 9 de Enero de 1786.

La casa solariega de la familia estaba situada en el montículo de la Mouta, al lado de una antigua Torre de defensa, era muy conocida, hasta que la "piqueta del progreso" la derribo, por la falta de interés municipal en mantenerla, como acabaron todos nuestros edificios testigos de nuestra historia.

El primero de los hijos Francisco Antonio Blanco Cicerón, bautizado el día 21 de diciembre de 1740, fue Juez, Procurador y Oidor de la Real Audiencia de Galicia y Caballero de la orden de Carlos III, falleció en 1799. Se había casado en la iglesia de Santa María de la Puente de Sampayo (Pontevedra) el 25 de octubre de 1789, con Doña Antonia Freire Saavedra, tuvieron un hijo: Tomas Blanco Freire.

El otro varón fue Lorenzo Blanco Cicerón, nació el 4 de febrero de 1748, bautizado en la iglesia parroquial de Santa María del Puerto de Marín el 10 de febrero, siéndole impuesto los nombre de Lorenzo, Francisco y Andrés. Fue Fiscal de la Real Audiencia de Chile por Real Carta fechada en San Ildefonso el 25 de agosto de 1774, tomó posesión en Santiago el 3 de abril de 1777; Protector de Indígenas; Oidor de la Real Audiencia de Charcas por título de 7 de agosto de 1779, y Director de la Academia de Derecho de Chuquizaca. Nombrado posteriormente Oidor DE La Real Audiencia de Buenos Aires, de 1787 a 1790. Contrajo matrimonio en la catedral de Santiago de Chile el 7 de agosto de 1779 con doña María de las Mercedes Calvo de Encalada, y falleció en Buenos Aires el 9 de diciembre de 1970, del matrimonio varios hijos: Manuel José Blanco Encalada, que murió en Santiago de Chile el 16 mayo de 1780, siendo niño. Ventura y Carmen.

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