Por fin se ha dado un gran paso en el aprovechamiento de gran parte de la Casa del Mar que, desde el traslado del centro de salud, está "para los pájaros". Esta semana se anunció que toda la primera planta del edificio se va a dedicar a Centro de Día para atender a personas mayores con dificultades que podrán pasar muchas horas entreteniendo la recta final de sus vidas, a la vez que permitirá el descanso de quienes les cuidan en sus casas que, con frecuencia, es un problema insuperable, para muchas familias. En mi humilde opinión, de todas las ideas que planeaban sobre la utilidad de estos locales, ésta es la mejor porque, la estadística o la mismísima realidad, nos dice que la población se envejece a pasos agigantados y serán muchas más, dentro de unos años, las personas que necesiten de estos cuidados. Ahora falta saber cuánto tiempo van a tardar en poner en marcha este servicio público tan necesario del que Marín, como en otras muchas cosas, carece a pesar de existir en numerosas poblaciones de parecido rango. Que las urnas están ahí, a la vuelta de la esquina, es una realidad y que cuando se ven en el horizonte aparecen anuncios como éste, también, aunque después se tarde en conseguir lo prometido y de éso ya tenemos experiencia aunque, también hay que decirlo, somos gente de poca paciencia. Bienvenida sea la noticia porque eso sí que es "humanizar" como se dice ahora.
In memoriam
