Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pedro de Silva

Buenos y malos

La lógica del sistema es estrictamente maniquea, descansa en la división entre buenos y malos. Esa diferencia, o pendientes, o balanza, hace mover el sistema. Por ejemplo, son inmigrantes buenos los que ya vienen formados y pueden incrustarse en la parte más dinámica de la máquina, y malos los que no vienen con esa mochila guay a cuestas. Por ejemplo, son coches buenos, y pueden seguir en la parte noble de las ciudades, los modernos que no contaminan, mientras que son malos, y se quedan fuera, los que ya están entrados en años. Por ejemplo, son países buenos los que tienen un PIB per cápita alto, y malos los que andan de la mitad para abajo del ranking. Según vamos viendo, los buenos (sean personas, cosas o países) vienen a ser los ricos, y los malos los pobres. Como es fácil de entender la moral que decide que esto es así la hacen los buenos, los malos bastante hacen con sobrevivir.

Compartir el artículo

stats