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¡Ay, la enchenta de Reyes!

Crisis seguirá habiendo, pero no se notaba en los restaurantes de Vigo la víspera de Reyes, con la ciudad y sus bares tomados por gentes del olívico lugar y visitantes ante la llamada del Muecín Caballero, del que la leyenda urbana dice que tiene el don de la ubicuidad o al menos el de la bilocación, de modo que puede estar a la vez dando un discurso ante los vecinos de Teis y otro, al mismo tiempo, de bienvenida a los Reyes Magos. El caso es que si ese día 5 tú entrabas al bar Puerto, entre el lleno podías encontrar de cena de Reyes a Begoña Cantero, Paulita Álvarez, Sonia Vivas y su Fernando Ezpeleta, Bea Baspino, Ruth Landeiro y su Marco... pero si entrabas en el Pigmalión, podrías saludar a Carmiña Valverde "la del Mosquito", a José Luis Cantero, a Pilar López Freire y Patri Cerdeira en una mesa, en otra a Maribel con su Nemesio Barxa, Paco Traspuesto o Chicamen Romero. Pero si ibas ese día al mesón Compostela te encontrarías a Carlos Mantilla, Fernando Escalera, Paco Doblas, Pablo Egerique, Ana Mosquera, Rafa Mera... y si ibas a La Comidilla a la misma hora verías a Ángel Prieto, Enma y Chesma, Fran "Bauhaus", Amparo Villar... ah, pero si te trasladabas al Paco Durán de Baiona podrías hablar con María del Carmen González Acuña, con Begoña Villar, José Mariño, Rodrigo Mariño, Julio Villar, Amalia Otero y herederos... y eso que Baiona no pertenece a la jurisdicción del alcalde Caballero. ¿Crisis?

Mesón Compostela, puro olívico

Y ya que hablo del Mesón Compostela, en el número 6 de la Plaza que lleva su nombre: Vigo tendría que darle algo así como una Medalla al Mérito en el Trabajo a este establecimiento hostelero, que abrió sus puertas hace unos 30 años donde antes había un almacén de suministros. Y es que Vigo cuenta en este entrañable espacio con un local tradicional, con comida tradicional sin floritura, camareros tradicionales y clientes tradicionales, y tres generaciones de ellos que han pasado por allí. Sus dos regentes actuales, Pepe Gil y Javier Alfonso (antes lo abrió una sociedad con retornados de Brasil), mantienen esa impronta que dan unos empleados ya veteranos, atentos y siempre amables. A ver sino con David, Octavio, Luis, Chicho, Gaspar y Rubén, y espero no olvidarme de algúuno, que han atendido por su nombre a clientes de hace décadas y ahora incluyen también a sus hijos. El Compostela es siempre un recurso familiar seguro en el que sabes lo que hay sin cambios ni adulteraciones, y es algo más que un mesón: un espacio principal de encuentro con sabor familiar y pura sangre olívico.

Graciela y su taller de poesía

Ya me dijo una vez Graciela Baquero Ruibal que el oficio de poeta es solitario, que muchas veces no tenemos donde mirarnos, aunque no lo decía por mí, que estoy muy poco dotado para tal arte creativa. Pero me lo decía porque el 14 de este mes ella misma comienza en el centro de Vigo un Taller de Poesía en el que escribir, pensar, leer, corregir la poesía será el reto. La poesía no quiere adeptos, quiere amantes, decía Federico G. Lorca, y ese va a ser el propósito, intentando superar la distancia entre el deseo y el acto creativo además de ampliar los conocimientos sobre la historia de la poesía. A quienes os interese os doy el teléfono necesario para informaros: 630456629.

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