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Nos fuimos al pazo da Fraga, en Crecente

Nos fuimos de comida pacega. Sí, sí, a eso del mediodía me recogieron en su coche el exrector Luis Espada y Merchi Castro, a los que seguían en el suyo el licenciado Morales y su María José Llauger (que canta tan bien como diseña empanadas), y nos encaminamos atravesando la verde campiña hacia Crecente. Allí, en su parroquia de Alveos, nos esperaba en el Pazo da Fraga con su sonrisa omnipresente su propietaria, María Luisa Fernández Anguiano. Un hermoso pazo con torre ahora casa rural con cinco habitaciones, rodeado de 3 hectáreas, dos de bosque y una de viñas de donde sale ese portentoso albariño Finca Garabelos. Ahí nació María Luisa atendida por su abuelo médico, ahí correteó con sus 4 hermanos y primos los veranos o navidades de la infancia y después con su marido, Nicanor Fernández Puga, magistrado de la Audiencia Nacional, y ahí sigue estando su refugio que combina con sus estancias en Vigo. Hace nada menos que 500 años que pasa la propiedad del pazo de generación en generación de la misma familia, ese pazo en que se alojó Maximiliano I de México, amigo de alguien de la casa. Una casa cuya familia compra FARO desde que nació y se suscribió Manuel Anguiano, capitán de la escolta de Palacio de Isabel II. ¡Qué mermelada de pimientos con queso, qué empanada de bacalao y berberechos "a la Llauger", qué carne ao caldeiro humedecida en caldo de la casa y qué leche frita!

O fillo de Manolo da Pousa, de Albeos

Por cierto que de allí, del mismo Albeos y muy cerca del pazo, a unos minutos de Portugal por el Miño, es Rubén Nogueira, el marido de Boris Izaguirre. Rubén, que fue a la escuela pública de Crecente y allí sigue alguno de sus compas de clase que conocí en la visita al pazo, era hijo de Manolo "da Pousa", taxista según creo, y nieto de Otilia "da Pousa", que tenía en Albeos una de esas pequeñas tiendas-taberna que llaman "Corte Inglés" por tener tantas cosas en tan pequeño espacio. Luego, si no recuerdo mal los padres de Rubén se vinieron a Vigo y vivieron en la calle Coruña con su hijo, aunque no sé si me lo invento. Que los dioses los protejan, que son buena gente.

El olvido de la belleza, una antológica

Hace años que Puri del Palacio esperaba con ansia este espacio expositivo. Por fin ha llegado la hora. Esta tarde a las 8 en la Casa das Artes Puri del Palacio inaugura "El olvido de la belleza", una antológica con más de 8 0 obras comisariada por e"l catedrático Antón Castro, que ha dividido la muestra en cuatro partes: microcosmos, agua, mis clásicos y el cuerpo. Las obras, de los últimos 25 años, van a estar acompañadas de un vídeo que ha realizado Luis Cortegoso en el que se va a ver cómo la pintora crea 18 de sus obras en unas animaciones, desde el parto de cada una hasta su final. A la inauguración está previsto que asistan pintores como Antón Pulido, Darío Basso y Marcos Míguez Puhinger, y amigos de la polifacética artista, desde el profesor de Práctica Orquestal, Miguel Quiñones, o María Vázquez de Diálogos 90, hasta Nuria Lorenzo, directora del Coro Gli Appassionatti o muchos de los componentes del coro Apóstol Santiago (tranquis, no pasarán lista). Y es que Puri tanto pinta o canta con igual éxito que toca el violín o hace amigos. Éche así, Puri.

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