El sistema sanitario gallego funciona bien o muy bien a pesar de posibles fallos humanos, que también los hay.

El éxito del sistema se debe a una serie de colectivos que hacen que esto sea posible.

Empezaré por los farmacéuticos. Yo recuerdo que, hace bastantes años, una farmacia estaba regida por un farmacéutico de carrera y tenía unos auxiliares que convertían la farmacia en una tienda de venta de medicamentos.Entre que los márgenes eran mayores y los sueldos de los empleados eran bajos, tener una farmacia era un formidable negocio y así se explica las cantidades exorbitantes que se pagaban por su traspaso.

Hoy una farmacia, aparte de ser regida por un farmacéutico de carrera, tiene contratado uno o mas farmacéuticos que cuando viene un paciente le orientan adecuadamente y evita tener que ir a su medico, los auxiliares de la farmacia son unos formidables técnicos con muy buena formación.

Pero la farmacia actual ha dejado de ser un buen negocio, los márgenes han bajado y los gastos de personal han aumentado considerablemente y de ahí que en la actualidad una farmacia sea rentable si se consigue una clientela satisfecha.

Otro colectivo que hace que nuestra sanidad sea una de las mejores del mundo es la de los médicos. El nivel intelectual y de formación es muy bueno porque, desde hace más de treinta años, para entrar en la Facultad de Medicina es necesario tener una media mínima de notable.

En nuestro sistema sanitario tú puedes escoger tu medico y se da la circunstancia de que hay veces que no es posible porque ese médico tiene su cupo cubierto y tienes que escoger a otro que seguro que es un gran profesional.

El grado de preparación de nuestros médicos de familia hace que la mayor parte de las veces te curen y así evitamos tener que ir al especialista. Yo tengo experiencia de eso, el paciente tiene necesidad de cariño y de comprensión y la mayoría de las veces nos encontramos con estos buenos profesionales. En el caso de Galicia, el médico, la mayoría de las veces gallego, es una persona de gran sensibilidad y hace su tarea con facilidad.

La tercera pieza que hace posible esta realidad es la Administración, en este momento tenemos de conselleiro de Sanidad a D. Jesús Vázquez Almuiña.

Almuiña ha sido muchos años alcalde de Baiona, médico de profesión y fue capaz de hacer de Baiona uno de los pueblos más bonitos de España. Supo mantener intacto su casco viejo con todo su encanto y convertir Baiona en uno de los puertos deportivos más importantes de Europa, el parador nacional que fue una realidad de D.Manuel Fraga, hacen de Baiona un lugar de descanso y de gran vida comercial.

Pero Almuiña no lo tiene fácil, hace cincuenta años los españoles empezaban a trabajar a los catorce años y se jubilaban a los sesenta y cinco, y cotizaban al sistema cincuenta años y la esperanza de vida era de setenta años... las cuentas eran fáciles.

Hoy la realidad es muy distinta... se empieza a trabajar a partir de los veinte años y los años de cotización a la Seguridad Social difícilmente llegan a los cuarenta años con la diferencia de que la esperanza de vida es de ochenta y cinco años. Gran desafío para la Administración.

Sirvan estas líneas para rendir homenaje a estas tres piezas fundamentales que son los farmacéuticos, los médicos y la Administración, que hacen posible esta magnífica realidad.

*Miembro del Club 55