Me gustaría reflexionar sobre quién desde el año 2007 es el alcalde de Vigo. El alcalde de nuestra querida ciudad.

Una ciudad a la que Abel, con su compromiso, dedica cada minuto de su actividad. Una ciudad de la que se siente orgulloso y cuyo esperanzador futuro desea seguir construyendo con ilusión.

Abel como buen marino mercante, tuvo muy claro que Vigo tenía que ser el timonel de un gran núcleo de población, de actividad, de riqueza social y económica que traspasara nuestra comunidad. Supo que Vigo tenía que liderar un gran área de crecimiento y desarrollar un papel importante en el avance económico e industrial en nuestro territorio. Y él, como alcalde, apostar por la economía y la competitividad, y convertir a Vigo en el referente de grandes, pequeñas y medianas empresas, siendo consciente de que el empleo permitirá un mayor bienestar a los vigueses y las viguesas.

Pero Abel es también el alcalde de las políticas sociales, izando las banderas de la justicia, la igualdad y la solidaridad.

Y quiso que nuestra ciudad no sólo fuera trabajadora, abierta y competitiva. También quiso una ciudad humanizada y renovada, donde se pueda vivir, pasear y disfrutar. Quiso que la cultura, la música, la actividad artística o el deporte estuvieran al alcance de todos. Que conviviéramos con ellas en sus calles sin distinción de origen o posición social.

Abel recibió una ciudad con la autoestima en horas bajas y la convirtió, con su propio esfuerzo, en un lugar de encuentro, acogedor y lleno de esperanza y orgullo ciudadano.

Abel hace lo que dice, y dice que la política municipal es la política del compromiso real, la de la dedicación absoluta, la de la cercanía en la gestión ciudadana y la del consenso.

En definitiva, Abel representa el compromiso sincero con la ciudadanía, que deja impronta en cada barrio y tiene siempre presente que Vigo debe ocupar el lugar que le corresponde.

Abel, durante 12 años, demostró que la defensa de Vigo está por encima de ideologías y que Vigo es su bandera.

Y habituado a mirar a la ría, al horizonte, con una perspectiva abierta, casi sin límite, quiere seguir construyendo nuestro futuro. Y quiere seguir haciéndolo como lo hizo hasta ahora de forma inteligente, trabajando, con honradez y esfuerzo.

* Exministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente