La Ley de Bases de Régimen Local establece que en los Municipios de más de 20.000 habitantes son los Ayuntamientos los que tienen la obligación de prestar los servicios deportivos y la creación de instalaciones deportivas de uso público.

Pontevedra, ciudad y municipio de España, capital de la provincia homónima y con cerca de 83.000 habitantes debe ser la ÚNICA ciudad del Estado que incumple este precepto, pues desde hace muchos años, el Gobierno de esta ciudad en manos del Bloque Nacionalista Galego mira para otro lado, y prueba de ello es: la deuda de las subvenciones deportivas que mantiene con los Clubes desde hace dos años, el estado de abandono de las instalaciones deportivas municipales (pabellones de Monteporreiro, Salcedo, Marcón, etc), la falta de una ordenanza reguladora del uso y pago de las instalaciones distintas al Pabellón, la promesa incumplida de terminar este mandato con cinco campos de fútbol construidos, la ausencia de servicios de cafetería y bar en todas las instalaciones deportivas altamente concurridas, etc, etc.

Desde hace ya 2 años el club pontevedrés de rugby que presido "Susana máis que Rugby", está intentando que los "responsables" en materia deportiva del Ayuntamiento de Pontevedra que gobierna el BNG nos faciliten un campo o instalación o nos propongan otra solución alternativa para que podamos realizar un trabajo que es totalmente altruista, que tiene una gran carga pedagógica, con una importante labor de psicomotricidad y todo ello orientado a niños y niñas a partir de los 3 años que con gran demanda esperan que podamos iniciar otra temporada más.

Por todo lo expuesto anteriormente, confío que a este club se le dispense el mismo trato que al resto de los clubs deportivos de la ciudad, no queremos ser más que nadie, pero desde luego, tan poco menos.