Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Celos

Puigdemont descubre tarde que los de fuera solo dan tabaco

Celos, celos, celos; si no, no se comprende la hiperactividad. Por un lado el presidente de la república mental se autopropulsa de nuevo a la investidura telemática; por el otro, no descarta concurrir a las elecciones europeas, aliado, dicen, con la exsocialista Talegón; y, para colmo, ensaya el enésimo proyecto de fractura del bloque soberanista con un recurso extravagante ante el Tribunal Constitucional del Estado represor. ¿Buscando qué? Obviamente, ganar protagonismo con su reivindicación legitimista en vísperas del juicio que pondrá bajo los focos al líder de ERC y al resto de los insurrectos que no huyeron como cobardes.

Puigdemont es consciente de su pérdida de influencia y sabe que, con el juicio, aún perderá más. Tiene mañana el congreso fundacional de la Crida, que irá en solitario a las municipales porque Esquerra ya no pica el anzuelo de los neoconvergentes oportunistas. Y los sondeos (para las locales y las autonómicas, si las hubiere) sitúan a los republicanos bien por encima de la última fantasmagoría electoral del expresident. Así que Puchi intenta calentar el clima todo lo posible para situarse en el centro de la escena (como Abascal, sin ir más lejos).

¿Qué hay riesgo de fractura? Se la trae floja: el excéntrico recurso de amparo ante el TC lo demuestra. Va contra Torrent, de quien quiere vengarse desde octubre por privarle de la delegación de voto. Pero, de aquella, Torrent privó del mismo privilegio a los otros tres diputados de Junts per Catalunya (JxC) afectados por la suspensión decretada por el Supremo, y estos no han pedido amparo al TC para recuperarlo.

Puchi es diferente, se cree diferente, va por libre, y si hay daños colaterales, la culpa siempre es de los otros: la defensa de sus "legítimas" aspiraciones exige sacrificios. No se da cuenta de que la cagó fugándose. Influyen los que se quedaron y sufrieron cárcel; los de fuera, como en las partidas de cartas, solo miran y dan tabaco.

Compartir el artículo

stats