Esta huelga casi a la japonesa de los profesionales que trabajan en los PAC no se llevará al conselleiro de Sanidade, José Luis Vázquez Almuiña, de vuelta a Baiona, pero pone otra vez en entredicho no solo su política sanitaria, sino también la de todos sus antecesores. Los candidatos a alcaldes por el Partido Popular empiezan a mostrar sus uñas porque ya no tienen armas para contrarrestar tanto desaguisado en la sanidad pública: faltan médicos de Atención Primaria, faltan pediatras, faltan médicos de PAC y faltan medios y sobran estudios de viabilidad. Sí , de esos que elaboran empresas consagradas al éxito profesional con los que se pretende camuflar lo que desde hace tanto tiempo se advierte. Pese a todo se insiste en la estrategia. Se anuncia que se pretende realizar un estudio de necesidades sanitarias a nivel de Galicia. Y sorprende. Porque el experimento de laboratorio en O Morrazo no fue precisamente satisfactorio. Sirvió para calmar los ánimos durante un tiempo, pero nada más. Su resultado no hizo más que sublevar a plataformas sanitarias que buscaban, también hay que decirlo, colocarse en el mercado político. El estudio a nivel gallego terminará diciendo que los médicos son una especie en extinción. Al tiempo.