Vivimos en una sociedad que ha mudado costumbres y hábitos, inmersa en un continuo proceso de cambios, en los que las tradiciones están siendo solapadas por nuevos usos y las rutinas se modifican de forma rápida.
En medio de la vorágine de las nuevas tecnologías, en las que la inmediatez y la prontitud apremian, sucede que nos encontramos ante personas que aún mantienen intacto el sentido de lo permanente, de lo elaborado y laborioso, del cuidado de los detalles, obviando lo efímero y lo momentáneo, aferrándose a lo tradicional, a costumbres y hábitos que a día de hoy son incluso desconocidos para muchos.
Él es Antonio Varela Mourelle. Una persona de profundos valores y respeto a las tradiciones. Para nosotros seguirá perteneciendo siempre a un cuerpo de tradición y arraigo, basado en valores de respeto y ánimo de ayuda; un Guardia Civil, con mayúsculas, de semblante apacible y de carácter afable, que con su empeño y dedicación mantiene una de las tradiciones más emblemáticas y sentidas de la Navidad, como es el belén.
El noble arte del belenismo, en el que cada detalle es cuidado al máximo, en el que la paciencia cobra valor. Donde el mimo y el cariño es transformado en horas de trabajo minucioso y cada pincelada representa las cualidades que adornan la personalidad de este hombre, que no duda en brindar a todos y todas su buen hacer, y cuya única recompensa es la satisfacción de otros... Generosidad, que sin duda alguna es la mayor de sus virtudes.
Generosidad y altruismo de una persona de convicciones profundas con vocación de servicio. Cada año nos regala la oportunidad de disfrutar de aquello que con tanta pasión prepara, dándonos la ocasión de disfrutar de la tradición, poniendo a nuestra disposición las múltiples cualidades que lo adornan, y haciéndolo desde lo más importante que posee un ser humano, su voluntad y su tesón.
Hoy el homenaje es para él, sin olvidarnos de Marisol, que contribuye a la creación de tan magnífico belén.
Hoy el homenaje es para quien nos hace sentir orgullo de lo que somos y representamos. Antonio es esa estrella que él sigue colgando cada año en nuestro pesebre y que cada año nos alumbra en nuestro trabajo.
*Responsable de la Oficina Periférica de Comunicación Comandancia Guardia Civil - Pontevedra
