Ante el anuncio del cierre de nuestra más antigua sociedad: "Liceo Casino", acaso sería conveniente, y así lo entendemos nosotros, dedicar siquiera unas líneas, para recordar a todos los marinenses que con su cierre, concluye un pedazo de nuestra historia local, de más de ciento veinte años, en el transcurso de los cuales se realizó parte de nuestra vida social y que encierra una serie de actividades, actos y circunstancia que, en cada época, marcaron el devenir social de nuestra Villa, por lo que de alguna manera forman parte ya de nuestra historia colectiva, en la que muchos disfrutaron, otros se divirtieron y los más participaron con gran ilusión, encontrando en el "Liceo Casino" su lugar de esparcimiento, tertulia, entretenimiento y diversión.

Al desaparecer, por cierre, esta centenaria sociedad, se cierra un capítulo importante de la vida marinense y cierra para siempre una manera de relacionarse entre sí los marinenses. Podríamos recordar aquí los asaltos, bailes, competiciones y entretenimientos que a lo largo de los años se celebraron para disfrute de sus socios y familiares, sin olvidar la numerosa colonia veraniega que en tiempos, acudía a nuestra Villa pasar sus vacaciones. Por eso hoy muestro adiós emocionado por la desaparición de una sociedad que marcó una larga época en nuestra vida cotidiana, con sus acuerdo y desacuerdos, sus luchas dialécticas, pero con una unanimidad propia en el servicio que la sociedad hacía a Marín.

Por eso, se habla hoy, del destino de su local social y de su patrimonio. Y al hilo de tantos comentarios queremos hacer, siquiera una pequeña puntualización en el fin de aclarar, si es posible, como vemos los que fuimos socios activos, cuál debería ser el destino de los mismos.

En primer lugar entendemos que el local sería bueno que sirviera para utilizarlo en otros fines, para disfrute de los marinenses, que a la postre fueron sus dueños, por lo que deberían seguir utilizándolo. Por eso nos parece aceptable que el ayuntamiento tome la iniciativa para conseguirlo, otra cosa es el medio que debe utilizar para ello. No vamos a entrar aquí en una discusión porque no es el caso. Otro punto importante, son los documentos e información que el "Liceo Casino" guarda en sus Libros de Actas, Reglamentos, Presupuestos, Libro de actividades, etc., etc., porque estos si que debían de pasar a propiedad municipal, en el sentido que deben guardarse, como fuente de in formación de la vida social de aquellos años. Podrían depositarse en la Biblioteca Municipal, por ejemplo, para que cualquiera que quisiera alguna información pueda dirigirse a la misma, porque lo que no debe ser es que desaparezcan documentos de la sociedad, porque esos pertenecen ya a todos los marinenses.

Otra cosa con las obras de arte, y en esto debemos decir que nos parece muy bien que se entreguen en el Museo Torres, pero advertimos en las notas de prensa, que del cuadro que regalo el insigne marinense Manuel Torres, ni se nombra, nosotros entendemos que es fue una donación que el artista hizo al "Liceo Casino" para disfrute de sus socios, y ahora, desparecido, debe ser para disfrute de todos los marinenses, porque así lo quiso su autor.