Y puestos a comentar esta noticia, hay que recordar lo que ocurrió no hace muchos años, cuando el gobierno local era de otro signo. Se andaba ya con la negociación de los terrenos del INVIFAS donde ahora se ubica el Centro de Salud y se barajaba dejarlo donde estaba, en la Casa del Mar, mejorando las instalaciones lo suficiente para prestar un servicio digno. Que uno recuerde, hubo contactos con empresas que entienden de aparcamientos subterráneos y, al menos una de ellas propuso la construcción de uno en ese parque, siempre que se mantuviese el Centro de Salud donde estaba. Entre que la negociación con el INVIFAS, cosa nada fácil por el carácter especulativo de ese organismo dependiente de Defensa, estaba en marcha y avanzada, y que el deseo de apurar la consecución de la instalación sanitaria era cosa de vida o muerte, políticamente hablando, y no se quería retrasar más el asunto, se hizo oídos sordos y la propuesta de la empresa quedó en nada porque consideró que sin dar servicio de aparcamiento a quienes acudieran al Centro de Salud, aquello no era nada rentable. Y así fue como el parque se quedó como está, el Centro de Salud perdió su perfecta ubicación anterior y los marinenses perdieron la ocasión de contar con un servicio, tan necesario entonces como indispensable ahora y, sobre todo, en el futuro. Las prisas siempre son malas.
