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Pepe Cadavedo, maraton man

Esta vez no pude ir a la presentación de su último libro de recetas, uno por año y van 13, que tienen al menos dos características: un promedio de 100 recetas y un mínimo de 200 fotos en las que sale él y deja salir a su lado a los principales chefs de la Galicia toda y algo de Asturias. Pepe Cadavedo no solo es el tipo más fotografiado del universo todo y el que más restaurantes y bares ha visitado y probado sus condumios por mor de su trabajo, sino que este asturiano de Cudillero que cada año organiza una fabada ya legendaria a la que ahora va hasta el presi de la Xunta es un currante de envergadura que llegó a Vigo en 1972 para traernos su buen humor, su afabilidad y su capacidad para liarnos aquí y allá. Lo juro por Manolo Rouco, Ángel Ratón, Ángel Gil o Alfredo Iglesias, que lo conocen al desnudo, de siempre. Yo le vi por vez primera en el subsuelo de un pub tocando con nocturnidad, premeditación y alevosía su guitarra y cantando "El abuelo" (grabó un disco, Rosina) y desde entonces sé que ha estado con programas propios en la radio 38 años, en la tele local... Recuerdo que con Beni García, que se nos fue, hizo un maratón de radio en Nova Olimpia con 50 horas en directo (¿cómo mingitaron?), otro en la disco Golden... Y no me olvido de la retransmisión de todos los partidos del Celta desde el 94 al 2000. ¡Pepe, cariño, ele!

En la Flor del Tiempo, de tapas

Tuve que hacer más de 400 kms. para ir el sábado de tapeo a La Flor del Tiempo, que es el bar de Charo en Salamanca, pero no me arrepiento. Charo se ajustó el mandil, nos abrió un tinto Toro Madremía y nos puso en la mesa unas deliciosas "Pleurotus eryngii", a las que los cristianos llamamos setas de cardo, pero que yo llamaría teresianas porque habían sido cogidas ese mismo día en prados de Alba de Tormes, donde vivió la santa Teresa. Era Castilla pero en aquel bar estaba Agustín Ledesma, que fue en Vigo delegado de la ONCE, y luego entraron José Muñoz, exsenador del PP, y Clara Ledesma, veraneantes en Vigo y Canido hace muchos años. Al poco vinieron unas patatas meneás, que es un puré de patata con tropezones de tocino, aceite, pimentón, laurel y sal. Seguimos con unos callos con garbanzos pedrosillanos, pequeños pero que no hay otros como ellos; vinieron después unas manitas de cerdo deliciosas, luego unas albóndigas a la Charo, y rematamos con un queso zamorano de oveja añejo al romero. Campo-Estrella. Poco comer aunque parezca mucho. Luego quedamos con Faus, que es guía del Ieronimus, la torre catedralicia salmantina, pero que esta vez nos guió por el Pozo de Nieve del convento de San Andrés, donde pasó unos años San Juan de la Cruz y a donde traían en carros la nieve de la sierra desde el siglo XV. Paso por una galería subterránea y leo un letrero que dice: "Por delante se trazó la carretera Villacastín-Vigo". Y es que Vigo está por todas partes, ya lo dice el alcalde.

Fragmentos de otoño y Alicia

Y que os recuerdo que, a pesar de que este año no hay Outono Fotográfico por la retirada de la subvención del Concello de Ourense, la programación de la Sala de Fotografía Sargadelos continúa, con dos exposiciones programadas para este otoño. La primera, ya inaugurada, es "Fragmentos de Amnesia" de la fotógrafa Alicia Seoane.

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