Y hablando del "Parque de los Sentidos" es de justicia volver a señalar el maravilloso trabajo de Santi Castro Soage, un verdadero artista de la madera capaz de convertir el tocón de un árbol seco o el tallo de una especie invasora en una figura sorprendente. Castro Soage está siendo el artífice de la concentración de obras de arte en un parque que, si ya tenía fama por su contenido y a pesar de los tarados que prefieren destrozarlo todo amparados por la oscuridad o los momentos de soledad en el mismo, se está convirtiendo en un foco de atención pues este virtuoso de la madera ha conseguido reproducir una veintena de figuras de los animales más exóticos con sorprendente habilidad lo cual amplía el interés de los visitantes de la popular finca que es en este momento un polo de atracción turística para, sobre todo excursionistas infantiles que proceden de toda Galicia y pasan allí una jornada inolvidable. Si buena fue la idea de dar a Briz la vida que ahora tiene en tiempos del alcalde socialista Fran Veiga, no es menos meritorio la continuidad que se mantiene con los sucesivos gobiernos que sostienen la obra y, como se ve, la mejoran. Solo falta que "os de sempre" acaben entendiendo que sus fechorías nocturnas no hacen más que devaluar una gran obra y costar dinero al pecunio general que somos todos, incluidos sus propios padres y madres.