Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Del cocinero Alex Mushiato

Yo comí hace unos días en el restaurante de un italiano, Nicola Di Canio, que acabó en el pueblo salmantino de Pedrosilla del Ralo por culpa de una española que conoció en Alicante. ¡Ah, el amor, cómo redirige las vidas! Al francés Alexandre Mushiato, cuya cocina habéis probado muchos, le pasó algo parecido: está en Vigo porque se enamoró de una gallega. Yo le conocí en Nigrán hace unos años, él y yo como jurados de un concurso de tapas. Entonces estaba en las cocinas del Pazo de A Touza, luego le visteis en el Mauro de San Adrián de Cobres, después como jefe de cocina cuando abrió La Central en la Plaza de la Constitución, y ahora en el Sentido Cocina en la Alameda, que reabrirá en breve sus puertas y el 3 de septiembre dará a probar su nueva carta. Un día le pedí a Alexandre que me contara algo de su vida y supe que había nacido en Chalons, que está en la Champagne francesa, rica en vinos. Allí hizo estudios culinarios y su espíritu viajero lo llevó a Alsacia, a París, luego 3 años a Suiza... Quería dar el salto a América y como su inglés era básico se fue a perfeccionarlo a Irlanda pero... conoció allí a una gallega y en vez de hacer las Américas se vino a Vigo, hace ya casi 20 años. ¡Qué mundos más inesperados esconde cada persona! Yo ya os conté el de Alexandre que veréis en los fogones del Sentido Cocina.

Sí, pizza y tostas por metro

Apuesto que no lo creéis pero es cierto. Quedé con varios amigos en la calle Laxe, 9, para comer una pizza de medio metro, pero si la pedimos de metro nos la ponen igual. El restaurante se llama Demetro Long Food (comida larga) y quiere demostrar que no por el tamaño se pierde la calidad. Lo abrió en Vigo a principios de verano David Barrera Gallego, un verinés nacido en Alemania, y es un hostelero enamorado de su cocina que, respaldado por un doble horno de piedra, tanto te puede servir pizzas de cinco sabores de medio metro o un metro como tostas de pan de centeno de hasta un metro o 6 tipos de salchichas importadas de Alemania, algunas de tamaño gigante con patatas con su piel a la francesa. Cuidan el producto, la masa la fermentan en dos días, saltean los vegetales a la plancha antes de ir al horno, cepillan los champiñones... Todo esto me lo contó él en la misma barra y yo sentí que quiere demostrar la ilusión que se pone en cada producto. Aún no lo estrené, lo haré este fin de semana con un grupete del barrio pero oler, olía divinamente. Y ensaladas, ricas ensaladas. ¡Suerte, David!

Qué fotos pero cómo esperan

Mucho contento nos producen las fotos que nos mandáis, con las que celebramos cumpleaños, actos culturales... Lo que pasa es que vuestra participación es tal que las fotos a veces hacen lista de espera, y ahora me está pasando lo que en todos los veranos. Tengo más fotos que días de trabajo me quedan para vacaciones, pero ya resolveremos. Tengo en espera las del peluquero Faílde y su familia, de las chicas del Plaff de fiesta, de Gregoria y sus 103 años recién cumplidos, del Club Ciclista Traviesas, de la familia Izquierdo Martínez, de remeros del Náutico, ex alumnas de Cluny... ¡Paciencia!

Compartir el artículo

stats