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Tribuna libre

Jesús Silva, Benposta y la Ciudad de los Muchachos

En el próximo mes de septiembre se van a cumplir los siete años del fallecimiento de Jesus Silva Méndez, sacerdote conocido en nuestra ciudad como "Padre Silva". El que en 1956 había creado en Ourense la "Ciudad de los Muchachos", colocando en el mapa mundial con ello a nuestra ciudad y provincia, va a hacer 62 años. Figura controvertida como pocas, merece sin embargo nuestro homenaje y también clarificar de alguna forma su errada andadura en la última década de su vida, al no ser fácil comprender como el padre termina por matar a su criatura, tal como hizo él al solicitar en los últimos tiempos de su "Bemposta" a la Consellería de Educación el cierre de la escuela y, de esta manera, la renuncia al concierto educativo. Concierto que en los últimos años era una de las pocas entradas de dinero que tenía para mantener abierta la Ciudad de los Muchachos en la finca de Seixalvo. La solicitud de cierre la realizó por estar enfrentado al equipo de docentes de Benposta y haber perdido el diálogo con ellos. En lo que tampoco le ayudó su hermano, que por su actitud estaba creando muchos conflictos con el personal de la institución.

Para crear su "Ciudad de los Muchachos", el Padre Silva se había inspirado en la "Boy´s Town" de Omaha en Nebraska (USA), fundada en el año 1917 por el sacerdote de origen irlandés Edward Joseph Flanagan ( Padre Flanagan), y que todavía funciona hoy y también tuvo y tiene un circo ambulante. Jesus Silva conoció esta institución al visionar precisamente en 1956 la película de Norman Taurog titulada Forja de hombres, que había sido rodada en 1938, y en la que se presenta la institución para chicos americanos, haciendo el papel del Padre Flanagan el actor Spencer Tracy, y Mickey Rooney el de un chico acogido en la institución. Sorprende sin embargo saber que el Padre Silva no aceptaba de buen grado que, aun cuando era de una claridad meridiana, se le dijese que, para crear su "Ciudad", se había inspirado en la americana a través de este film. Pues, al visionarlo en un cine ourensano, tuvo la feliz idea de crear en nuestra ciudad una institución similar, casi con los mismos principios educativos y organizativos de la institución norteamericana. Los comienzos de la del Padre Silva tuvieron lugar en la parte antigua de la ciudad, próxima a las "Burgas", con el montaje de la campaña denominada "Tra-pa-bo-cha" (recogida de trapos, papel, botellas y chatarra). Al principio se instalaron en la casa de la madre de Jesus Silva, cerca de la antigua cárcel hoy abandonada, e instalaron los talleres y la imprenta. Como, por suerte, el proyecto progresaba, aumentando la acogida de más muchachos, la "Ciudad" acabó por instalarse en la finca próxima a Seixalvo, con el nombre de "Benposta". Gracias al trabajo extraordinario de Jesus Silva, sus muchachos y docentes, de esta pequeña "república escolar", salieron formados en muchos campos del saber y de las artes y oficios. Los que mucho le deben a Benposta y el Padre Silva, y que lo reconocen todavía, aunque puedan criticar algunos errores cometidos por él.

Hubo un momento en que algunas personas le pidieron al conselleiro de Educación, Celso Currás, que, pese a habérselo pedido el Padre Silva, no cerrase las escuelas, porque eso era el fin de la Benposta, pero declinó la petición, dado que la ley es clara al entender que si lo solicita el "propietario legal" (el Padre Silva) de las escuelas, está obligado a anular el concierto educativo. Tal como al final sucedió, terminando el proyecto de "Benposta" en sus últimos años como el "rosario de la aurora". A partir de ahí se abrieron infinidad de conflictos judiciales sobre el mismo, muchos de los que todavía continuan en la actualidad. Además de los errores cometidos por el Padre Silva y su hermano, el tema urbanístico de la finca de Benposta, la actitud de muchos políticos frente a las hiper-críticas de Silva y su televisión, el conflicto con los docentes contratados, que ya comentamos antes, y de imposible solución, y otro buen número de temas y asuntos, terminaron con un proyecto educativo muy importante que teníamos en Ourense y muy valorado en el exterior (sobre todo en Latinoamérica, Alemania y Japón). En su día el Padre Silva fue propuesto por su obra para el Premio Nobel de la Paz, en tres ocasiones, por Israel, República Dominicana, India y por Japón. Recibió varios premios, y entre ellos el "Rafael Bárez", concedido por la Asociación Xustiza e Sociedade de Galicia, reconociendo su trabajo con muchachos, niños y jóvenes, de todos los substratos sociales desfavorecidos, en particular entre aquellos afectados por la pobreza o la violencia. También el Premio del Sindicato de Espectáculos de España, la Medalla de la Paz de la ONU, el Trofeo París Match, la Medalla de los Amigos del Circo de Francia, la Espada Samurai de Japón y la Medalla al Mérito en Bellas Artes en la categoría de oro, que le entregó el rey en su día. Además de la de Ourense y Celanova, a lo largo de los años fueron creadas outras "Benpostas" en Bogotá, Villavicencio, Montería y La Guajira (Colombia), La Guaira y Maracaibo (Venezuela), Managua (Nicaragua), Manaus (Santo Domingo), Mozambique y Bruselas. Recientemente, el realizador de cine Albert Brull, ha rodado un documental durante más de año y medio dedicado a la Benposta y al Circo "Los Muchachos", con más de noventa minutos de duración y con muchas entrevistas a benposteños e investigadores del proyecto de Jesus Silva.

El primer trabajo serio e importante sobre la Ciudad de los Muchachos de Ourense, fue el realizado por el profesor titular de la Escuela Normal y Facultad de Educación ourensanas, José Paz, durante los años 1972 y 1973. Que le sirvió para su tesina de licenciatura en Pedagogía, dirigida por el profesor de la Universidad Complutense Víctor García Hoz, con el título de "Realizaciones de la educación personalizada en la Benposta-Ciudad de los Muchachos de Ourense". Esta tesina y estudio sirvió de base fundamental posteriormente para tesis doctorales de otros investigadores de países como Alemania y Japón. En la misma se reseñan muchos aspectos de la Benposta: sus orígenes, los modelos similares de otros lugares, como la del Padre Américo en Portugal, la del Padre Flanagan en EUA, la Pestalozzi de Italia, etc, los principios educativos y organizativos, las actividades, los diferentes talleres, la escuela internacional de circo, el huerto escolar, las diferentes instalaciones, las asambleas diarias, las personas que, elegidas democraticamente, gobernaban aquella pequeña escuela-ciudad modélica, en la que se respetaban las ideas filosóficas y religiosas de todos los benposteños, la moneda propia de la Benposta (la corona), etc. Dicha tesina acogió numerosas ilustraciones, incluidas fotos, la mayoría de ellas de la autoría del fotógrafo ourensano Enrique Reza.

En un pequeño artículo como el presente no es fácil dar a conocer de forma completa el modelo educativo-didáctico de la Benposta. Es por ello, que prometemos escribir en el futuro uno monográfico sobre este tema. Señalaremos ahora de forma sintética, en el poco espacio que nos resta, los aspectos pedagógicos más significativos. El mayor valor educativo que tenía la Benposta era la vida y el ambiente que respiraban los "benposteños" a lo largo de los días, las relaciones que se establecían entre ellos, las actividades circumescolares en las que participaban, los talleres de todo tipo, el circo y su escuela, la asamblea diaria, las elecciones periódicas (para alcalde de la "Ciudad", por ejemplo), la práctica de deportes variados, la "Gran Aventura" (que tenía su lugar en San Pedro de Rocas), las actividades en el huerto escolar y el respeto por la religión de cada uno. De forma sintética podemos reseñar los principios pedagógicos más destacados:

1.-Respeto por la singularidad e individualidad de los muchachos, fomentando la creatividad, tanto verbal, como plástica y dinámica.

2.-Fomento de la autonomía, dando participación a todos en la asamblea diaria, desempeñando cargos, eligiendo a los representantes, trabajando por la "Ciudad" y por los "bemposteños".

3.-Desarrollo de los valores humanos de solidaridad (por ejemplo con la infancia desvalida del mundo, porque según Silva "el niño debe ser el rey"), tolerancia para todo tipo de credos, culturas, etnias e ideas, espíritu democrático, en lo que la Benposta fue siempre pionera, pacifismo, estando contra las armas, las guerras y todo tipo de violencia.

4.-Fomento de la responsabilidad de los "benposteños" en todas las actividades, procurando que sean verdaderos ciudadanos. En este último tema era muy importante la llamada "Gran Aventura", período en el que se formaban los futuros dirigentes, gobernantes y líderes de la "Ciudad". La responsabilidad también se lograba por medio de la auto-financiación, de la auto-responsabilización y del auto-gobierno. Para ello existía moneda propia y los trabajos de los muchachos en los diferentes campos y talleres contaban con un salario.

5.-Fomento de la alegría y del optimismo, por medio del trabajo en grupo y participativo, de las actividades lúdicas, de la ayuda mutua, de las múltiples actividades circum-escolares que se desarrollaban.

6.-Fomento del espíritu ecológico, para lo que, con gran éxito, funcionaba un huerto escolar, del que durante gran parte del año se sacaban por medio de su cultivo los productos de la huerta que iban a consumir luego los muchachos.

7.-Aprendizaje de un oficio, respetando siempre las preferencias y capacidades de los muchachos. La mayoría de los que estuvieron en la Benposta viven hoy desarrollando el oficio que allí aprendieron.

Los pilares pedagógicos básicos del Padre Silva eran: aprender a pensar con los demás, aprender a pensar con el cuerpo y aprender a pensar éticamente respetando la opción religiosa de cada uno.

(*) Educador Social y Animador Cultural.

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