Francisco Cambó y Batlle fue la primera personalidad relevante que visitó el Círculo Mercantil, cuando todavía no había cumplido un año de vida.
Huésped de honor del conde de Creixell en su pazo de Barrantes, el ex ministro de Fomento y Hacienda en sendos gobiernos de Antonio Maura, aprovechó unos días de descanso para realizar en compañía de su anfitrión dos visitas de carácter cultural a Santiago y Pontevedra a finales de septiembre de 1929. Entonces se mantenía apartado de la actividad política, porque recelaba de la Dictadura Militar de Primo de Rivera.
Cambó llegó hasta la puerta de la sede del Círculo Mercantil en su propio automóvil. Allí esperaban sus anfitriones y también su amigo Raimundo Riestra Calderón, a quien saludó muy efusivamente.
La situación del ferrocarril en España y, particularmente, el enquistamiento que arrastraba la construcción del Ferrocarril Central Gallego, acaparó buen parte de la charla distendida que Cambo mantuvo con Rafael Varela y todos los miembros de su junta. El político conservador explicó su postura favorable a la nacionalización de la red ferroviaria, que estaba en manos de compañías privadas y cuyo funcionamiento dejaba mucho que desear, al tiempo que ofreció su apoyo al proyecto gallego.
La directiva de la sociedad obsequió a su invitado con un lunch, que Joaquín Pintos fotografió para la revista Vida Gallega, y a la hora de la despedida prometió su regreso a Pontevedra para impartir una conferencia en el propio Círculo Mercantil. Antes de abandonar la ciudad, Francisco Cambó realizó una visita a los museos Provincial y Arqueológico en compañía de Raimundo Riestra, y luego continuó su viaje a Vigo con sus acompañantes.
