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La Banda de Silleda ante un nuevo reto

Convertida en una de las mejores bandas de música no profesionales de Galicia, afronta con un intenso trabajo de preparación su participación, el 21 de julio, en el 'Ciudad de Valencia'

Desde los años cincuenta del siglo pasado, la Banda de Música de Silleda, formada por unos treinta y cinco componentes, se caracterizaba, según el juicio de los expertos, por tener muy buen timbre y por "sonar muy bien". Un exdirector decía que " empastaba moi ben". Esta cualidad era algo tan esencial en esta agrupación, que le confería un estilo propio, especial, diferente a otras bandas. Hay que decir que en aquellos años no había músicos profesionales, ni con estudios musicales, salvo un poco de solfeo elemental; sin embargo, suplían esas carencias con el trabajo e interés que ponían, lo que les permitía captar muy bien y asimilar las directrices del maestro que los dirigía. Fruto de esos esfuerzos fue la calidad adquirida, la posterior presentación a algún certamen y la consecución de algunos premios, como en 1959, en Vigo, bajo la dirección de D. Antonio Vaquero, donde obtuvo el primer premio en el Certamen de Bandas de Música y, en 1971 en Ourense, dirigida por D. Ubaldo Núñez Rivas, con la consecución del segundo premio. Todo un éxito para aquellos tiempos.

Desde su fundación hasta su disolución temporal en 1977, la banda solamente participó en los dos certámenes regionales citados. Sin embargo, en esos mismos años había una pugna constante con otras bandas famosas de la zona. Esa pugna -así lo querían las comisiones- llevaba a algunas de estas agrupaciones a actuar juntas en la misma fiesta y en el fragor de la noche, con toda la gente alrededor del palco, se llevaba a cabo una insólita confrontación, un duelo artístico con otras bandas, no menos famosas y reputadas, tales como la de Lantaño, Merza..., que en más de una ocasión acabaron mal y con enfrentamientos físicos entre los asistentes y partidarios de las bandas. Siempre había un vencedor, al menos moralmente. En la época de Tomas Beteta, Antonio Vaquero y Ubaldo Núñez, la banda de Silleda salía con frecuencia, además de aplaudida, victoriosa, y eso le hacía aumentar su fama, su caché y, como consecuencia, firmar más contratos.

Tras la refundación en 1985, con la creación de la Escuela de Música, esta banda tomó otros derroteros. Se rejuveneció, modernizó instrumentos, aumentó en número y, sobre todo, se nutrió de jóvenes con estudios de música y de grandes directores. El trabajo de esos años dio su fruto y hoy es una de las mejores bandas no profesionales de Galicia, si no la mejor, con un gran palmarés y una serie de premios regionales, nacionales e internacionales en su haber. Una rápida consulta a la hemeroteca y al archivo de esta Banda así nos lo confirma. 1º Premio en el Certamen de Bandas de Música de Vigo (1959); 2º Premio, Ourense (1971); 2º Premio Certamen Nacional de Bandas de Leganés (2002); 1º Premio e Mención de Honor Certamen Diputación Provincial de Pontevedra (2002, 2005, 2007, 2014); 2º Premio Sección Especial Diputación Provincial de Pontevedra (2009); 1º Premio y mención de Honor en el Certamen Internacional Villa de Altea (2010); 1º Premio Certamen Internacional Villa de Aranda, en Burgos (2013). Banda Xuvenil: 2º Premio Certamen Galego de Bandas de Música de Galicia (2014) y 1º Premio en el IX Certamen Galego de Bandas de Música (2015).

Triunfar en un certamen regional, nacional o internacional son palabras mayores. Existen una cantidad de bandas, a veces casi profesionales, con una calidad asombrosa. Ser finalista de un certamen nacional ya es un triunfo. Cuando una banda popular, no profesional, como la de Silleda, plena de gente joven y aficionados en su mayoría, llega a la final de un concurso nacional como el de Altea o internacional como el de Aranda de Duero, y, además, lo gana, es un éxito impresionante. Conviene insistir que, en estos años, la Banda no sólo compite, sino que se atreve con obras mayores, tales como Olé Contrabandistes, Libertadores, La Vall de la Mura, Ibérica, Il Barbiere di Siviglia de G. Rossini o la famosa Overture 1.812 de P. I. Tchaikovski, y, solamente por eso, ya merece ocupar un puesto entre las grandes.

Ciudad de Valencia

Este año, la Banda de Música de Silleda, tras unas gestiones previas y ante la invitación cursada por la organización valenciana, aceptó el reto de participar en el Certamen Internacional de Bandas de Música Ciudad de Valencia, que tendrá lugar del 19 al 22 de julio de 2018, en el Palau de la Música. En el mes de febrero la prensa local se hacía eco de la noticia: "La Banda de Silleda participa en el Certamen Ciudad de Valencia. Actuará el 21 de julio, en la Sección Primera, compitiendo con la onubense Banda de Punta Umbría y la portuguesa de Amigos da Branca ".

La Banda de la Escuela Municipal de Música de Punta Umbría (Huelva) fue fundada en 1994 y cuenta desde 1999 con una escuela muy dinámica y con un elevado número de alumnos. Esta joven banda se alzó con el tercer puesto en el Certamen de Bandas de Villafranca de los Barros (2002) y con el primer premio en el IV Certamen de Música de Olivares (Sevilla) en el año 2017.

La Asociación Recreativa y Musical Amigos da Branca, perteneciente al Ayuntamiento de Albergaria-a-Velha en el N.O. de Portugal, fue fundada en 1940 y, tras una desaparición temporal en 1968, fue refundada en 1976. Tiene una escuela de música con más de cien alumnos, ha editado tres CD y posee un gran palmarés en tierras portuguesas, además de dos grandes triunfos en España. Alcanzó, en 2007, el primer premio en Altea y, en 2011, el tercer premio en el Certamen Internacional de Bandas de Música Ciudad de Valencia.

Estas dos jóvenes bandas, serán las adversarias de nuestra Banda en el certamen valenciano. Llegada la fecha señalada, estas tres agrupaciones musicales rivalizarán entre sí, con la finalidad de hacerse con el triunfo final. Tal como exigen las bases del certamen, son bandas de música no profesionales y saldrán al escenario de acuerdo al resultado de un sorteo previo. En cuanto al número de componentes, la banda de Silleda acudirá con algo más de un centenar de músicos, ya que en la Sección Primera, en la que participará, el número exigido está entre los 81 y los 110.

Cada banda tendrá un total de tres actuaciones. En el concurso oficial cada una interpretará dos obras: una obligatoria y otra de libre elección. La obligatoria, propuesta por el Comité Organizador, será Joglaresca, del compositor Francisco A. Boda, que será la primera en ser ejecutada. La segunda, cuya duración será de 14 a 22 minutos, será una obra elegida por cada banda. En el caso de Silleda, será sin duda la gran sorpresa con la que espera impactar favorablemente tanto al público, como al jurado, ya que se trata de una versión para banda sinfónica, que será estrenada oficialmente ese día. Todo un secreto, un lujo y un desafío. Además de estas dos obras, fuera de concurso y previo al mismo, ha de interpretarse un pasodoble de presentación. En este caso, la obra elegida por la Banda lleva por título Música y vino, de Manuel Morales Martínez, compositor y profesor del Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia.

Preparación

Esta Banda de Silleda, tras ser aceptada su invitación y adaptándose a las bases del concurso, desde los primeros días del mes de marzo inició, bajo la dirección del profesor Rafa Agulló, la preparación del complejo y difícil repertorio. Se trataba de conjugar las actividades y compromisos ordinarios de la Escuela y de la Banda, con este nuevo reto de la preparación de un concierto de este nivel, lo que suponía un esfuerzo especial. Se realizó un plan de trabajo intensivo y específico, donde las sesiones ordinarias de ensayos se multiplicaron e intensificaron, de tal manera, que a lo largo del primer semestre estuviese preparado todo el repertorio.

Fruto de un trabajo intenso, la Escuela mantuvo sus actividades, la Banda sus compromisos y el repertorio pudo ser interpretado, a modo de ensayo final, en el pasado Festival de Bandas de Silleda. Con la finalidad de lograr un trabajo perfecto, está en la mente de la dirección de la Banda, volver a interpretarlo, en un par de conciertos pre-certamen programados para los días 1 y 15 de julio, de acuerdo con la Banda de Ribadavia, que participará también en el Certamen de Valencia, pero en otra categoría.

Al no ser una banda de música profesional, la asistencia a este certamen internacional, dadas las distancias, los desplazamientos, el alojamiento y los gastos que conlleva, solamente se puede realizar, si cuenta con un apoyo económico y logístico. En este caso, las generosas y desinteresadas ayudas provienen, una vez más, de los Amigos de la Banda, de la ANPA Musiquiños, del Concello de Silleda, de la Xunta de Galicia y, en concreto, del departamento de Cultura, que sufragará la totalidad del transporte.

Silleda: Pobo e Música. O, lo que es lo mismo, todos con la banda. Así reza el ya conocido lema de la EMMS. Haciendo honor a esta divisa, sería deseable que en ese desplazamiento a la ciudad del Turia -a la ya numerosa expedición, formada por los miembros de la Banda y sus familiares- se unieran todos aquellos aficionados, vecinos o simpatizantes que lo deseen, para, además de disfrutar de la hermosa capital valenciana, darles ese calor humano en forma de apoyo y aplausos. A aquellas personas que quieran asistir y no tengan vehículo propio, la Escuela de Música les facilitara información y ayuda.

Desde estas páginas le deseamos un nuevo éxito a esta veterana y laureada Banda. Tras el certamen, cuya participación en él ya es un éxito y un premio para los miembros de esta Escuela y Banda de Música, sería hermoso, además de traer el primer premio, dejar flotando en las calles valencianas, en el ajardinado cauce del río Turia o en lo alto de las Torres de Serrano, mecidas por el viento de Levante, unas alegres notas musicales con el sello inconfundible de la Banda de Música Municipal de Silleda, nuestra mejor embajadora cultural de cara al mundo.

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