La Policía Local de Cangas tuvo el domingo mucho trabajo. Pero no vaya a pensar que fuero cuestiones de seguridad las que mantuvieron ocupados a los agentes. Los policías que estaban de servicio fueron atormentados a preguntas relacionadas con cómo se podía retirar el vehículo del aparcamiento público sin molestar a la procesión o por donde iba a pasar la procesión. Ésta última fue la más constante, la que agota casi la paciencia. Una y otra vez recitaron el itinerario, pero sin alcanzar el éxito, porque una buena mujer, tras escucharlo preguntó: ¿Pasa el Cristo por el casco vello, señor agente?. La respuesta fue evidente: por esas calles solo cabe de perfil.
El sistema táctico del PP en la procesión
El PP acudió a la procesión del Cristo con un claro sistema: cuatro en el centro, con Rafael Soliño y Pío Millán como extremos y José Enrique Sotelo y Dolores Gallego en el doble pivote. La estrategia era controlar el juego, tener mayor posesión. Y a fe que lo consiguió. Quien me dijeron que estuvo desde la barrera sacando fotografías fue el alcalde de Cangas, Xosé Manuel Pazos. Ayer acabó la pasarela política del Cristo con la misa de la Virgen del Carmen.
