Hoy estaremos a las 20 horas en la Capitanía Marítima de Baiona porque allí inaugura su exposición de fotografías, "Ametsetan" (Soñando), el tolosano y vigués de adopción Javier Ortiz que, tras una vida trabajando por el mundo como técnico de alto standing, halló tras su jubilación, en la fotografía, su asignatura siempre pendiente. Ya nos asombramos en su anterior exposición en el café vigués UF de la fuerza de sus imágenes de "A rapa das Bestas", pero lo que hoy veréis, en gran formato, es una propuesta aumentada y mejorada con nuevas fotos de esta tradición, que es quizás el tema principal, aunque también hay una interesante sección dedicada a marionetas y otros temas diversos como paisajes, arquitectura... Todo ello en 50 fotos de gran formato colgadas y otras 100 diseminadas por el amplio local baionés del paseo marítimo.
Una comida en "El Soriano"
Insuperable la carne que el otro día comimos con Javier Ortiz en el Soriano, a donde me llevó Jaime López "Capitán" en su nuevo coche, de tamaño más acorde con el suyo. Allí estaban en la mesa, aparte de Ortiz, tres vigueses de pro con los que montamos un excelente encuentro: Alberto Benavides, jefe técnico de Ibercisa, Jaime Pérez, encargado de Mantenimiento de Embutición en una nave de Citroën y Juan Castro, exgerente de un taller de reparación de barcos. Si decimos que el vasco Ortiz tenía una empresa (Gresin) de alta especialización en prensas de embutición muy demandada por Citroën, podríamos decir que fue un placentero encuentro del sector Metal, salvo Jaime López, hostelero liberado, y yo, que ya se sabe. La carne, superior, me recordó la línea del tolosano Matías Gorochategui, que tiene en aquel pueblo el asador Casa Julián y con el que hemos comido y aprendido sobre los secretos de la carne dos o tres veces en Vigo, traído por los hermanos Magaz de Soriano.
Bien por Ensemble Galería
Hermoso espectáculo el que pudimos ver y oír el otro día en el Museo del Mar, más de 15 músicos de Ensemble Galería en movimiento para interpretar la Quinta de Beethoven sin partituras. Alejandro Garrido puede sentirse satisfecho del tremendo esfuerzo realizado sin el estímulo de los beneficios económicos, ya que los precios eran simbólicos pero con ese del reconocimiento que se selló con los grandes aplausos. Seguro que lo mismo sintió a quien trajisteis como director, el reconocido violinista serbio Gordan Nikolik, al verse como parta de una acción en la que la música clásica se proyecta entre artes escénicas como danza o teatro de los mismos músicos.
Y en el "Muíño do Vento"
La Plaza de la Constitución estaba el viernes intransitable, de la gente arracimada que estaba en mesas o las que en pie oían un concierto. Nosotros huimos hacia Alcabre, hacia ese Museo del Mar donde actuaban los Ensemble Galería, pero hicimos parada al lado para tomar un vino. ¡Vaya ambiente culinario en el Muíño do Vento, las mesas repletas y un florido grupo de camareras moviéndose sin cesar de la cocina a los comedores! Allí me encontré con el cantante Tincho Fernán, que me regaló su reciente disco " Nunca es demasiado tarde", que ahora estoy oyendo encantado, y con Gorio Álvarez, de La Tribu, el grupo donde canta Paloma Llorente. Los dos se iban a La Reserva, donde se celebraba la Vigo Vocal's Reunion. No sé cómo acabarían.
