Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Trump no ha engañado

Antes del 20 de enero pasado, día de su toma de posesión, una de las incógnitas sobre el nuevo presidente de EE UU, Donald Trump, era saber si llevaría adelante su controvertido programa político o si la púrpura que conlleva ser el mandatario de la primera potencia moderaría sus impulsos. Es evidente que los 15 primeros días en el cargo han despejado las dudas a favor de la primera opción.

Trump ha explicitado con claridad su agenda aislacionista y proteccionista de cara al exterior, a través de: trato de favor al Reino Unido, dirigido por la brexiter Theresa May; acoso intimidatorio a México (conminándole a pagar el muro fronterizo y amenazando con penalizar las importaciones); enfrentamiento con Pekín, despreciando la política de una sola China y acusando de devaluar su moneda y ataque a una UE a la que augura poco tiempo de vida, con apoyo a visiones populistas y criticando la política migratoria del líder del proyecto europeo, Alemania.

A nivel interno tampoco se ha quedado corto, en cuanto al cumplimiento de sus promesas de campaña, entre las que destacan: la revocación de la reforma sanitaria del expresidente Obama, la suspensión de dos regulaciones federales por cada nueva que se cree y, la más controvertida de todas (auspiciada por su jefe de Estrategia y, desde hace pocos días, miembro del Consejo de Seguridad Nacional, Stephen Bannon), el veto a ciudadanos procedentes de siete países musulmanes "propensos al terrorismo".

Pero no olvidemos un dato final: pese a los recursos judiciales y a las protestas levantadas ante medidas como la última citada, alrededor de un 50% de la población estadounidense (por un 40%, en sentido contrario) ve con buenos ojos la política antiinmigratoria de Trump. Así que los árboles no deben impedir que se vea el bosque a la hora de afrontar a este insólito presidente.

Compartir el artículo

stats