Hay una relación simbiótica entre atletismo y Juegos Olímpicos. El inicio del atletismo, en los Juegos, siempre es un momento especial. Muchas son las figuras atléticas que forjaron su leyenda gracias a sus logros olímpicos: Viren, Zatopek Al Oerter, Carl Lewis, Nurmi, Gebrselassie, Flankers- Koen, Evelyn Ashford, etc.

Río llega con muchas incógnitas. La primera es saber quién será el dominador del medallero. EE UU siempre es favorito, fundamentalmente porque tienen representación de gran nivel en casi todas las pruebas. Destacan sobre todo en vallas, saltos y velocidad pero tienen varias opciones más como en peso masculino y decatlón, entre otras.

En el pasado Campeonato del Mundo de Pekín dominó, por primera vez, Kenia. Además lo hizo logrando victorias en pruebas en las que nunca habían destacado en grandes campeonatos. Un ejemplo fue el 400 metros vallas o la jabalina. Sin embargo, a Río no parece que lleguen con el mismo nivel. En fondo (5.000 y 10.000) lo tendrán complicado para ganar ya que los favoritos son otros (la etíope Ayana en mujeres y Farah en hombres) pero siguen conservando todo su potencial en otras disciplinas: 800, 1.500, obstáculos y maratón, principalmente. Etiopía sigue siendo su gran rival en fondo. Los vecinos del norte cuentan con un equipo femenino muy potente que hace presagiar que serán ellas las dominadoras. Cuentan con las hermanas Dibaba y Ayana como principales estandartes. Es un país que siempre nos regaló un gran campeón por década (Bikila, Wolde, Yifter, Gebrselassie, Bekele) pero que sigue sin encontrar un referente visible en hombres que pueda sustituir a los grandes campeones mencionados. Por contra en mujeres están en la edad de oro y con un cambio generacional que permite vislumbrar recambio a Tirunesh Dibaba y Meseret Defar, sus grandes campeonas hasta la fecha.

Bolt será la gran estrella. Su presencia hace que todo lo demás quede en un segundo plano. Gatlin es su gran rival en 100 y en 200. La duda que hay sobre Bolt son las constantes lesiones y son muchas carreras previas que pueden afectarle. La velocidad femenina parece más abierta con hasta seis contendientes a ser la reina (Gardner, Thompson, Schippers, Fraser- Pryce, Bartoletta y Bowie). Pero además hay otros puntos de gran interés: la final de 400 hombres y mujeres, el decatlón con Eaton, la lucha en la combinada femenina (Theisen-Eaton vs Ennis- Hill), el duelo en triple (Claye-Taylor), el 1.500 femenino con Genzebe Dibaba-Faith Kipyegon, Valerie Adams intentando ser la primera atleta en conseguir tres oros consecutivos en una prueba individual en atletismo; Rudisha contra todos en el 800, Kiprop en el 800, Kemboi intentando acrecentar su leyenda en los obstáculos, etc. .

Otros parten con el cartel de claros favoritos: Lavillenie (pértiga), Fajdek (martillo hombres), Wlodarczyk (martillo mujeres), EE UU (ambos 4x400), Semenya (800), Ibargüen (triple), Reese (longitud) y Perkovic (disco) son algunos de los más claros favoritos a la victoria.

El equipo español es el que llega con más opciones de medalla desde Barcelona 1992. Tres son las principales bazas y además todas con muchas opciones de cosechar alguna medalla (Miguel Ángel López en marcha, Ruth Beitia en altura y Orlando Ortega en vallas). Las últimas competiciones de los tres invitan al optimismo, sobre todo en el caso de Miguel Ángel López, que luchará por el oro en la primera jornada. Su estado de forma es inmejorable como lo demuestra su registro en el pasado Campeonato de España de Gijón (38:06.24 en 10.000 marcha).

Tres son los atletas gallegos en Río (Alessandra Aguilar en maratón, Frank Casañas en disco y Jean Marie Okutu en longitud). La lucense conseguirá en Río ser la primera gallega que acude a tres Juegos Olímpicos, igualando la hazaña de Carlos Pérez y Alejandro Gómez, los dos únicos gallegos que pueden presumir de dicho logro. Ella es la que tiene más posibilidades de brillar de los tres. En los dos últimos Campeonatos del Mundo (2013 2015) fue 5ª y 17ª. Casañas (1978) es el más veterano de todos los que alcanzaron la clasificación olímpica y su sueño es volver a entrar en una final olímpica, algo que tendrá complicado. Este año ha mejorado con respecto al año pasado pero está irregular. Okutu afronta sus primeros Juegos y el paso a la final lo tiene muy complicado.

Una de las anécdotas de los Juegos es la longevidad de algunos entrenadores. Van Niekerk, vigente campeón del mundo de 400, es entrenado por Ana Sophia Botha de 74 años, pero el récord lo tiene Arch Jelly, que fue entrenador de John Walker (campeón olímpico en Montreal 1976). El entrenador neozelandés, a sus 93 años, dirige a Harmish Carson, un millero ecologista "kiwi" que tiene por costumbre entrenar en medio de la naturaleza.

*Director Técnico de la Federación Gallega de Atletismo