El debate sobre el huso horario ha vuelto. Cada año cuando nos toca adelantar la hora se reinicia esta discusión. Nos encontramos, de nuevo, con la disyuntiva sobre si seguir con el horario que España comenzó a aplicar en 1940, momento en el nuestro país se adaptó a la hora central europea, posiblemente por cuestiones puramente políticas, o si debemos cambiar a lo que nos correspondería en función del meridiano de Greenwich (GMT 0). En este último caso, compartiríamos el mismo huso horario que países como Portugal y Reino Unido. Si nos atenemos al huso horario mundial, en función de los meridianos, España tiene una hora que no le corresponde.
De hacerse este cambio, debería afectar a toda España. No tiene ningún sentido que unas comunidades autónomas por estar más cerca del GMT 0 tuvieran una hora y otras, más al este, tuvieran otra. Además, toda esta discusión está relacionada con el cambio horario, que busca un ahorro energético. En España se combinan los dos elementos y el resultado es que en los meses estivales nos levantamos casi oscuras y los más madrugadores se pueden acostar con luz. Desde luego esta situación no parece la más adecuada si se quieren preservar el buen funcionamiento de los ritmos biológicos.
Ahora bien, desde una perspectiva economicistas ¿qué consecuencias tendría el cambio de hora para Galicia? Si tenemos en cuenta que disfrutaríamos del mismo huso horario que nuestros vecinos lusos, esto podría ajustar mejor las relaciones de intercambio con Portugal, al compartir la misma franja horaria. Teniendo en cuenta las importantes relaciones económicas que tenemos con nuestros vecinos, este ajuste mejoraría el tráfico comercial y la prestación de servicios.
Además, si finalmente se opta por modificar el huso horario, es más que probable que también se decida por finalizar la jornada laboral antes. Estos días se comenta la posibilidad de terminar a las 6 de la tarde. Esto permitiría mejorar la productividad de nuestra economía, ya que a medida que aumenta el tiempo de trabajo se reduce su intensidad.
En Galicia se trabajan muchas horas. De hecho somos junto a la Comunidad de Madrid y Castilla-La Mancha las que tenemos una jornada laboral más larga. Sin embargo, y como les enseñamos a nuestros alumnos en las primeras clases de economía, el esfuerzo que se dedica al trabajo va cayendo a medida que aumenta el tiempo dedicado a trabajar. Como decía Baltasar Gracián en el "Oráculo manual y arte de prudencia", lo bueno, si breve, dos veces bueno. A ver, si por una vez, nos aplicamos el cuento.
Las estadísticas corroboran que en España (y en Galicia) se registran la mayor cantidad de horas destinadas al trabajo, pero, al mismo tiempo, somos uno de las comunidades autónomas con una productividad más reducida, tal y como ha venido señalando en numerosas ocasiones el Foro Económico de Galicia. Es más, probablemente este ajuste horario permitiría que Galicia acelerase su recuperación económica, si con ello se logran aumentar las exportaciones y se consigue reducir la debilidad del sector industrial.
Es también muy probable que al volverse al horario europeo, se fomente la jornada continua y se adapten mejor los horarios de los centros docentes, con un esperable mejor rendimiento de los alumnos.
Finalmente, con el cambio horario se conseguiría un mayor ahorro energético, siguiendo la misma lógica (y estimaciones) que se suelen argumentar para adelantar la hora, ya que se aprovecha más tiempo la luz solar. Según el Instituto para la Diversificación del Ahorro y la Energía (IDEA) el ahorro para el conjunto del Estado sería del 5% en términos de consumo eléctrico. Según la Consellería de Economía e Industria de la Xunta de Galicia, a través del Instituto Energético de Galicia (INEGA) este ahorro para nuestra comunidad autónoma se cifraría en un 0,4%. Eso sí, el mayor ahorro se daría en el sector servicios, con cerca de 3%.
Por lo tanto, parece que todo son ventajas cuando se apuesta por ajustar los horarios españoles a lo que marcan las directrices científicas. Es más, al restablecerse el huso horario con la hora europea occidental, tendríamos la misma hora en toda España, ya que no habría diferencia con las Islas Canarias. España, por lo tanto, dejaría de ser una "rara avis" en los husos horarios europeos.
Solo queda por determinar si finalmente esta iniciativa se aprobará, ya que no podemos obviar que de forma periódica se debate su conveniencia, y hasta la fecha nada se ha hecho al respecto. Esperemos que no vuelva a ser un brindis al sol, y esto nunca mejor dicho, dado el tema que nos ocupa.
