Hablar de ganadería en Galicia es hablar de calidad de carnes, de un medio natural primordial para la cría de ganado, de una gran abnegación de la gentes del rural, pero también es hablar de minifundismo, falta de productividad y por tanto rentabilidad de las explotaciones.
Día a día vemos aparecer noticias muy alarmantes de reducción progresiva e imparable de granjas de producción de carne y de productos lácteos con las graves consecuencias que tiene en términos de presencia poblacional y de actividad económica en el rural gallego. Pero nuestra vocación agrícola e interés por el desarrollo endógeno, tiene que impulsar la importancia de nuestro agro en la economía y al igual que en las empresas en general, es muy recomendable tomar como referencia de lo que hay que hacer en las mejores prácticas que son conocidas, quisiera aportar un pequeño grano de arena, recomendando a nuestras empresas ganaderas que miremos en el espejo de la ganadería uruguaya.
Uruguay un pequeño país al que le he tratado de encontrar similitudes desde el punto de vista de la producción y exportación de productos cárnicos, tiene una gran reputación internacional como productora cárnica, pudiéndose encontrar carne uruguaya en los mejores restaurantes del mundo, así como en sus mercados y distribuidores de alimentación.
Galicia tiene 2,7 millones de habitantes, frente a 3, 2 millones que tiene Uruguay, el cual a su vez tiene en la ganadería uno de sus recursos fundamentales, siendo en términos relativos un país eminentemente agroexportador. Similares características climatológicas, de medio natural y de vocación agrícola. Es verdad que Uruguay tiene 176 mil km2, frente a 30 mil km2 de Galicia, por tanto cuenta con un territorio mayor en el que se puede desarrollar una ganadería extensiva en mejores condiciones que en Galicia.
No obstante, la exportación de productos cárnicos en Uruguay alcanza 1.700 millones de dólares, que representa un 20% del total de exportaciones, frente a la exportación de productos cárnicos de Galicia que ronda los 170 millones de euros, el 0,86% de las exportaciones gallegas.
La diferencia es tan enorme que en los segmentos de carnes de alto valor comercial por su calidad, Galicia está en condiciones más que favorables para crecer en sus exportaciones y por tanto inducir el necesario impulso de desarrollo económico de nuestra reputada ganadería, constituyéndose en un factor estratégico determinante de una adecuada evolución económica, demográfica y medioambiental de nuestra querida Galicia.
*Economista
