El próximo martes y a lo largo de un par de semanas, las salas del Museo Torres albergarán una exposición de cuadros del pintor marinense Gabriel Barros. Aunque son muchas las personas de esta villa que saben pintar y lo hacen muy bien, son menos los que demuestran tal afición por enseñar lo que, en el silencio inspirador de sus obradores realizan durante meses, incluso años, para expresar lo que llevan dentro. Gabriel Barros es un alumno del desparecido pintor marinense Manuel Torres y en su casa tiene montado un estudio en el que se pasa horas dándole a los pinceles y reuniendo los colores para dar forma a sus ideas plásticas. En esta ocasión va a colgar un buen número de óleos sobre siete temas distintos que recorren todo lo que el pintor tiene a su alrededor, personas, paisajes y "cosas" en general que podrán sorprender a más de uno porque, para la mayoría, las cosas que están alrededor pasan desapercibidas. Durante quince días podremos ver esta nueva exposición de Barros que ha sido realizada con trabajo pero con serenidad desde que hace ya varios años colgó su anterior colección en las mismas salas con notable éxito. Pues que se repita.
