Galicia acaba de cerrar otra semana grande para el sector pesquero con la exitosa Feria Internacional de Productos del Mar Congelados (Conxemar), que un año más ha convertido a Galicia en el epicentro mundial del sector. El certamen ha vuelto a demostrar la enorme potencia y pujanza de la pesca gallega y de su industria asociada. Una evidencia más de que ha sabido reinventarse, modernizarse y capear con solidez la tempestad de la crisis para salir adelante más reforzado que nunca. Hay perspectivas de futuro y, afortunadamente, el sector todavía no ha tocado techo. Toca ahora que las administraciones se arremanguen para que Conxemar pueda abrirse a toda la cadena productiva, desde la pesca extractiva a la transformación y gran distribución, y así seguir creciendo. Ampliar el recinto ferial de Cotogrande, mejorar los accesos y potenciar los vuelos de Peinador son deberes inexcusables para lograrlo.

El éxito de Conxemar es el de todo un entramado empresarial que se afana año a año por hacer visible desde la primera ciudad de Galicia el carácter estratégico de una industria con futuro. En la edición que acaba de concluir, transitaron por el Ifevi más de 27.000 visitantes de 105 países en un nuevo récord de asistencia. La falta de espacio obligó incluso a dejar empresas fuera. Un total de 520 stands de 40 países atestaron los 33.000 metros cuadrados disponibles. La feria volvía a erigirse, pese a las estrecheces de superficie, en la segunda más importante de Europa solo por detrás de la que se celebra en Bruselas. Una cita organizada, por cierto, por la misma compañía que intentó, sin éxito, tumbar Conxemar con un certamen paralelo en Barcelona que tan solo resistió tres años.

Las 17 principales empresas gallegas presentes en Conxemar generan más de 17.000 empleos en todo el mundo, contando con la red exterior de filiales de firmas como Pescanova o Iberconsa. En conjunto facturan más de 2.500 millones al año, el equivalente al 4,5% del Producto Interior Bruto (PIB) de Galicia. Sectores tan importantes como el financiero (3,3% del PIB), la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca extractiva (4,1%) o las telecomunicaciones (2,1%) están por debajo de ese listón. Además de las mencionadas contribuyen a ese mérito empresarial firmas como Profand, Grupo Pernas, Mascato, Fandicosta, Pescapuerta, Grupo Pereira, Pescados Rubén, Congalsa, Cabomar, Galfrío, Stolt Sea Farm, Alfrío?, por citar solo a algunas de ellas. Un conglomerado empresarial con epicentro principal en Vigo, pero que se extiende a toda Galicia e incluso trasciende al territorio de la comunidad.

Conxemar es un formidable escaparate de la marca Galicia para ganar mercados y abrirse al mundo. Ninguna otra feria mueve en la comunidad semejante volumen de público y de negocio, lo que no impide que la región esté sembrada de recintos vacíos o que apenas logren llenar una sala de reuniones con sus actividades. Y sin embargo falta espacio donde más se necesita. Conxemar ha vuelto a reclamar la ampliación del Ifevi en 5.000 metros cuadrados. Pero sigue esperando a que las administraciones le den de una vez al recinto las dimensiones necesarias para que la feria pueda desarrollarse en todas las especialidades.

Como también urge un mayor compromiso de todas las instituciones públicas para mejorar las infraestructuras complementarias. Los accesos viarios al recinto para evitar que se reproduzcan los atascos que llegaron a formar colas de hasta una hora. O acelerar la instalación de la pasarela peatonal en construcción que enlazará el nuevo parking de Peinador con el recinto ferial que, por supuesto, ha de estar a la altura del evento: ser de fácil accesibilidad, cómoda para transitar y bien resuelta estéticamente. En definitiva, una pasarela digna y no una estructura metálica desangelada del siglo XIX.

Un año más, Conxemar ha contribuido también al empuje de la hostelería. De nuevo se han llenado los hoteles y no solo los de Vigo y su área. También los de la provincia. Los hoteleros han hecho de nuevo el agosto e incluso han alargado la ocupación con motivo de la cumbre de la FAO sobre la pesca responsable y sostenida, el mayor congreso organizado por la entidad fuera de Roma, donde tiene su sede. La intensa actividad congresual ha vuelto a poner de manifiesto la necesidad de reforzar el aeropuerto del sur de Galicia con más conexiones aéreas y mayores frecuencias. Porque, ¿cuánto tiempo van a seguir cruzados de brazos los responsables de que cada vez más participantes extranjeros tengan que acudir a la principal feria de Galicia a través de la terminal de Oporto, ante la imposibilidad de encontrar en Peinador los enlaces que necesitan?

Así pues, va siendo hora de que las administraciones públicas pasen de las palabras a los hechos y se tomen en serio las demandas del sector. Los organizadores están convencidos de que todavía asoman un montón de oportunidades de negocio. Su reto es hacer crecer el certamen; el de la administración, propiciarlo. Conxemar no reclama nada que no se merezca. Solo exige que se le proporcionen las herramientas para desarrollar todas sus potencialidades y seguir abriendo mercados de los que luego se aprovecha toda la comunidad. Y también las administraciones públicas, dicho sea de paso. Los extraordinarios resultados cosechados en sus 17 años de vida son razones sobradas para acometer la mejoras pendientes que tanta falta hacen.