De la Barbería al Cosmos
Vuelvo de A Coruña, de admirarme por su belleza urbana porque es nuestra, gallega y española, y todos debemos alegrarnos de lo bueno que nos es común, y de mosquearme levemente permitiéndome una sana envidia localista, porque allí tengan instituciones como la Filmoteca Gallega o el Aquarium con un nivel que ya quisiéramos para esta ciudad. Conocí un local muy chulo en Orzán, 15, La Barbería, en cuyas paredes hay sorprendentes remakes fotográficos de famosos cuadros como El desesperado de Courbet o el Autoretrato de Van Gogh, imitados por modelos fotografiados. Ambiente retro y barbas yihadistas en una barra con muy buen trato sea para comer o beber. Y, si hablo de un bar coruñés, ¿cómo no voy a hablar de otro vigués, el Cosmos en la Plaza da Princesa? Y es que allí se inauguró una exposición de azulejos según la visión de su autor Edward Morgan. Azulejo Art es un nombre que el autor emplea para describir una exploración de los diseños de los azulejos portugueses en diferentes medios, principalmente con la fotografía. La esencia es que una imagen muy banal de objetos, edificios y detalles cotidianos se pueda convertir en algo precioso y muy alejado de su aspecto original.
Amando entre muros y rejas
Y ya que, además de copas, hablamos de arte, bien está que recordemos que hoy mismo inaugura el artista vigués Amando la exposición autorretratos en la Galería Sargadelos de Vigo. Una buena oportunidad, dice él, para enfrentar a vuestra mirada y poner en discusión una serie pictórica fechada en 2011 y 2013 en la que historia y pintura se han hecho reja, muro, entramado... una celosía desde la que mirarse y en la que pintarse. A mí Amando se me antoja en su tiempo libre un flâneur, un paseante, un explorador urbano, ese personaje literario inmortalizado por Benjamin a través de Baudelaire. Igual que el poeta paseante Carlos Oroza, que recorre Vigo ahora apoyado con elegancia en un bastón.
El seminario de Trasmañó
Yo al vigués Fernando Magdalena le debí de conocer en los años 80 (¿o antes?) cuando estaba en el Centro de Investigaciones Psicobiofísicas de Vigo, que lidiaba con temas al borde de la realidad como la parapsicología o los ovnis. Un activista (tranquilo) como él se deja ver allá por donde pasa y, últimamente, ya que vive en Trasmañó en finca con inigualables vistas, se ha empeñado en la dinamización del monte comunal como presidente de la a directiva de la Comunidad de Montes Vecinales en Mano Común. El otro día le vi en la presentación del libro de Akerman y me dijo que comienzan ahora un programa gratuito para la formación y sensibilización de comuneros y vecinos con un seminario sobre la extinción de incendios forestales, su problemática y modos de actuación.
