Esta palabra con su interrogante conduce a la duda de si realmente vale la pena serlo. Esto mismo sucede con los autónomos, agricultores y ganaderos.Hay muchos motivos que me llevan a hacer estas consideraciones que seguro son las de todos los colectivos mencionados. A un empresario no se le permite estar en el régimen general de la Seguridad Social, tiene que ser autónomo o estar clandestino, y si su empresa desaparece no tiene derecho a paro, ni indemnización del Fogasa u otro organismo. Y si tiene algún préstamo bancario sin cancelar ya vienen los buitres (no me refiero a todos los bancos por supuesto) a devorar tu patrimonio personal, como pasa en la mayor parte de los casos. Sin embargo si a los bancos y cajas de ahorro no les va bien, porque sus directivos y miembros de los consejos se aseguran buenas y desorbitadas indemnizaciones, planes de pensiones y otras prebendas, entonces viene el papaíto FROB y resuelve la situación inyectándole dinero y les permite seguir sacándole la piel al empresario, engañándolo y a los pequeños ahorradores como los de las preferentes, comisiones abusivas y en casos injustificables. Esperemos que se incorpore a la banca otra casta de altos cargos que independientemente de números fríos, valoren la trayectoria, el conocimiento. ¿Es razonable que un empresario que cotiza 42 años como autónomo por la cuota máxima, cobre 1.300 euros al mes y se permita el embargo de la cifra que exceda de unos 650 euros mensuales? Sobre el traslado de los Juzgados de Lalín a Pontevedra, actuaciones urgentes para evitarlo, creo que debemos implicarnos más todos los colectivos de Lalín y comarca.
*Empresario de Lalín
