Hay indicios que apuntan a que sí. Los tres campus de la Universidad de Vigo articulan ese territorio. La emigración de Ourense a Vigo es un flujo migratorio conocido. El veraneo de los ourensanos se dirige mayoritariamente hacia la costa pontevedresa. La existencia de grupos empresariales de comunicación vertebradores de ambos territorios también es un factor muy importante para la consolidación de espacios comunes.

Pero me temo que fuera de estos indicios, y otros similares, carecemos de un análisis sistemático y global de la situación actual y perspectivas de la integración económica del sur de Galicia. Espacio definido en sentido amplio como las provincias de Pontevedra y Ourense; y, en sentido más estrecho, por las áreas urbanas de Vigo-Pontevedra, por un lado, y de Ourense, por otro.

Evidentemente, ambas provincias mantienen estrechos lazos con el resto de Galicia, el resto de España, la región norte de Portugal y, en menor medida, otros países europeos (con Francia como líder en los intercambios comerciales por el sector de la automoción). De lo que se trata de saber si existe un grado significativamente superior de integración entre las provincias del sur de Galicia.

Y para ello, deberíamos analizar la movilidad de personas por motivos de compra, ocio y turismo, estudios, o trabajo; y la interrelación entre empresas, mercados preferentes, movilidad de mercancías-puertos del sur, aeropuerto de Vigo, etcétera.

Saber dónde estamos es el primer paso para determinar hacia dónde queremos y podemos ir, para obtener las ventajas que se derivan de agregar masa críticas y aglomerar consumidores, empresas; y planificar de forma global.

*Director de GEN (Universidade de Vigo) @SantiagoLagoP