- Avecilla -que no padece paranoia: solo está atenta a lo que ocurre a su alrededor- cuenta que no todo el monte es orégano ni todo el norte respalda al lobby. En concreto, un número notable de empresarios, enterados por FARO de la verdad, se está cayendo del guindo y haciéndose cada vez más y más preguntas. Uyuyuy.

- Una de ellas, coincidente, es la que se refiere al afán de algún poncio saliente para entrar en el nuevo Consejo cajero a través de lo que algunos llaman la puerta de atrás. No discuten la legalidad del método, pero sí la idoneidad y sobre todo la oportunidad. Y no saben qué pensará Ordóñez. Ojito.

- Algunas de esas gentes, que ya le iban perdiendo el miedo a los poderes fácticos que se sientan en aquella mesa camilla, saben ya cómo estaban las cosas, echaron cuentas y estudian una protesta. Pero lo tienen muy complicado para hacerse oír porque sospechan que no les van a dar Voz ¿Capisci?

- Hablando de otro asunto. Anacleto corrobora el cabreo que existe en el Benegá -bueno, sí, vale; sobre todo en el sector anxélico, que resiste- por la actitud del Pesoe con respecto al traspaso de las competencias de Tráfico. Y quieren pasar factura en junio, cuando toque hablar de pactos. Será más cara y quizá diferente barrio por barrio. ¿Eh?