Los ayuntamientos democráticos han jugado un papel fundamental en el proceso de modernización de España. Las políticas municipales han estado dirigidas a la atención de múltiples necesidades colectivas, muchas de ellas esenciales, y a la promoción, en general, del desarrollo local.

Nadie duda de que su capacidad de gestión y de generación de riqueza y empleo hayan sido piezas fundamentales para el desarrollo económico y social de nuestro país. Por este motivo, es fundamental que en una situación de crisis como la que padecemos sean tenidos en cuenta.

Así, una de las principales actuaciones del plan económico que ha elaborado el Gobierno de España es el Fondo extraordinario de Inversión Pública en el ámbito local, dotado con 8.000 millones de euros y con el principal objetivo de crear más de 200.000 nuevos empleos.

Esta dotación extraordinaria supone doblar la inversión presupuestada por los ayuntamientos para 2009 y es equivalente a lo licitado por diputaciones y municipios durante 2008, lo que va a suponer una importante mejora e incremento de los equipamientos sociales y espacios públicos de nuestras ciudades.

Esta medida pretende, también, sostener la viabilidad y el empleo de muchas PYMES relacionadas con la construcción y su industria auxiliar.

El fondo va a suponer, además, un impulso muy importante a la inversión municipal y, por tanto, a mejorar las dotaciones de capital de las entidades locales en un momento difícil para las finanzas municipales. La crisis financiera y crediticia ha afectado también en gran parte a la administración local.

Es, por lo tanto, una apuesta firme por el reconocimiento a los ayuntamientos como actores privilegiados de la economía de nuestro país y una clara señal de la confianza que el gobierno deposita en los ayuntamientos.

En estos complicados momentos es fundamental poner en marcha toda la capacidad de iniciativa que los ayuntamientos democráticos han demostrado a lo largo de sus casi treinta años de existencia y, para ello, es necesario, poner a sus disposición la financiación precisa.

Con seguridad, el Plan será un éxito y, una vez más, los ayuntamientos españoles van a demostrar su capacidad de impulso, de óptima gestión, y en muy pocos meses nos sentaremos a analizar los resultados, cuya calificación, sin duda, será un sobresaliente.

Resultará así, porque las corporaciones locales siempre han sido capaces de enfrentarse a las dificultades y siempre han logrado superarlas.