1. La culpa de la crisis es del neoliberalismo de Bush, basado en la falta de control y los gestores irresponsables. Si la crisis comienza con el pinchazo de las hipotecas subprime, en 2007, conviene recordar que en 1995, con Clinton, se modificó la Ley de Reinversión en la Comunidad, para que los bancos no prestaran sólo a los ricos. Se les forzó a conceder préstamos para la vivienda a personas con ingresos bajos y, a cambio, podían vender los créditos dudosos a terceros. Medida bienintencionada, efectos perversos.

2. "El origen de la crisis está en EE UU y está llevando a España a una situación difícil", Zapatero. Como señala el economista (y ex diputado del PSOE) Germà Bel, la crisis en España no es culpa de EE UU? sino que actuamos como ellos: burbuja inmobiliaria como en los peores estados yanquis y desequilibrio exterior superior al de EE UU. El problema es que el dinero pedido debe devolverse. Según Alfredo Sáenz, consejero delegado del Santander, para reequilibrar los préstamos concedidos por la banca española y los depósitos captados, se tardará? entre 8 y 16 años.

3. El petróleo cae (lo que hace descender los precios) y el Euribor también, lo que abaratará las hipotecas. El Gobierno vendía como positiva la caída de precios, pero el secretario de Estado de Economía reconoció lo evidente: los precios bajan porque no se consume (por endeudamiento, temor al paro o ambas cosas).

4. Pero España tiene mucho que aportar en Washington, ya que "tenemos el mejor sistema financiero" (gracias a un marco regulador? aprobado bajo el PP) y "no tenemos hipotecas subprime" (a la manera norteamericana, no: pero, ¿cómo se llama conceder un crédito a alguien que usa más del 50% de sus ingresos para su devolución y que no podrá pagarlo en los próximos meses?).