De la cigala y el bacalao

Pues allí estaremos, si el tiempo y la autoridad no lo impiden. La Villa del Tea, que si queréis podéis llamar Ponteareas y preside desde la alcadía Salvador González Solla, celebra hoy su Festa do Bacallao, de la que tuve la honra de ser pregonero años ha. A tal fiesta ha sido invitada la Orden de la Cigala de Marín en pleno, de cuya festa he sido también pregonero (si cobro los pregones me hago rico), y los de Marín van a aprovechar para nombrar en Ponteareas "caballeros" de su orden al alcalde ponteareano y a un servidor. No sé el ritual, si habrá que poner rodilla en tierra como los nombramientos de caballeros de antaño, pero a fe que lo haremos, por la salud de la cigala... y del bacalao. Si la autoridad no lo impide.

Leopoldo, Carmelo y Modesto

A raíz de mi nota póstuma sobre Leopologo García Ortega (que falleció la pasada semana pero ya no hay memoria en las redacciones que recuerde quién fue quién cuando se van), me escribe un e-mail Xulio García Bilbao, un vigués que vive en Guadalajara, donde trabaja como periodista y es miembro del Foro por la Memoria. A Xulio le conocí en la Plaza de la Constitución mirando hacia mi piso porque estaba añorando tiempos de la infancia. Su abuelo, Carmelo Bilbao, que llegó a Vigo depurado tras la guerra civil, había vivido en la casa que ahora ocupo y él, como nieto, había corrido de niño mucho por ella. Pero ¿porqué me escribe Xulio García Bibao a raíz de mi nota sobre Leopoldo García Ortega? Respondo. Leopoldo, honesto y viejo anarquista y republicano que llegó a tener en Vigo escondidos en su casa a los cenetistas Granado y Delgado (ejecutados después con garrote vil), vallisoletano, estuvo detenido en las Cocheras de Tranvías" de ese pueblo, una especie de campo de concentración en el 36 desde donde se "paseó" a mucha gente. Bueno, pues allí conoció Leopoldo a otro abuelo de este Xulio que me escribe, Modesto García Novoa, un médico gallego allí detenido también y que le curó una parálisis facial. Años después coincidieron los dos en Vigo, donde vinieron a vivir. ¡Y Xulio, el nieto, le hizo a Leopoldo en video (y la conserva) una entrevista de 4 horas sobre su vida! ¿No parece de novela?

Premio emiliano de novela

De los dos hijos que conozco del justamente respetado y admirado Xesús Alonso Montero, uno, Cuchús, es un "dominatrix" de la guitarra flamenca y al otro, Emilio, lo conocí en los años de la movida viguesa, donde hablaba desde un programa de musical culto, A Trincheira, de Radio 4. Hablaba desde allí pero luego nos encontrábamos en el aquí, en las calles de la noche. Luego Emilio se fue a Santiago, donde trabajó en el sector audiovisual, y ahora se volvió a Vigo. Me entero de que acaba de obtener un premio de novela por entregas que publica cada día de agosto un periódico y que han ganado gente como Marilar Aleixandre, Perozo... ¡pero su mérito es que él no ha publicado nunca una línea de narrativa!

Atención: De Vigo a Bos aires

Me dice Javier Pérez Buján, gerente de la Fundación Laxeiro, que la exposición que se inaugura el jueves en la planta baja de la Casa das Artes, y que luego irá al Parlamento de Galicia, es compleja e interesantísima, digna de que la veáis. Se titula "De Vigo a Bos Aires, Laxeiro e a pintura galega de posguerra" y tendréis allí obra también de Colmeiro, Seoane, Díaz Pardo, Mario Granell, Torres... Carlos Luis Bernárdez es el comisario de esta muestra que cuenta cómo a partir del fin de la guerra civil, Vigo se convirtió en centro de la creación artística e intelectual en Galicia. Abarca el período desde 1939 (final de la Guerra Civil) a 1951 (partida de Laxeiro a Buenos Aires). Habrá que hacer una visita detenida...