El análisis de las principales dimensiones socioeconómicas de la provincia de Pontevedra muestra una evidencia consistente: el proceso rápido de articulación desordenada de una Región Urbana cuyo eje central o "Calle Mayor" es el Eje Pontevedra-Vigo. El dinamismo de este Eje se extiende con fuerza hacia el Este y el Sur, llegando a desbordar la frontera portuguesa; hacia el Norte, se deja sentir con fuerza en Cangas y Moaña, y con menor fuerza hacia el área de Pontevedra, Vilagarcía y el Salnés.

El análisis pone de manifiesto la existencia de importantes ámbitos de complementariedad, negociables de inmediato y en los que aparece una demanda que no encuentra el cauce institucional apropiado para el aprovechamiento de las sinergias entra las dos ciudades. La intensidad de flujos e interacciones y la complementariedad de las actividades definen las bases de un eje metropolitano con una enorme capacidad de crecimiento. Vigo, en particular, presenta una carencia de suelo industrial, que podría encontrar una respuesta apropiada en el área de Pontevedra, en lugar de tener que recurrir a soluciones fragmentarias.

La integración de este Eje se muestra además como la estrategia con mayor capacidad de arrastre de las zonas de influencia de ambas aglomeraciones, que llegan a confluir sobre todo en el Morrazo, Soutomaior y Vilaboa. Esta alianza no exige renunciar a la diferente cultura urbana; al contrario, debe potenciarla como un patrimonio capaz de ofrecer una mayor riqueza de oportunidades. Esta lógica está permitiendo a Pontevedra superar la inercia tradicional y constituirse en un importante nodo urbano, especializado en servicios e industria ligera, de una red metropolitana o Región Urbana.

La integración del Eje Pontevedra-Vigo es el desafío que ofrece a ambas ciudades y sus áreas de influencia la oportunidad de dejar de ser aglomeraciones relativamente marginales, para convertirse en el núcleo central de la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal y alcanzar mayor poder de negociación en el ámbito español y en el entorno europeo. Resulta a su vez el camino obligado para establecer un horizonte de planificación negociada con los municipios del entorno, que experimentan las presiones del crecimiento de ambas ciudades.

Por disponer ambas ciudades de estudios estratégicos y con amplias bases de datos, la situación es excelente para abordar una planificación negociada con una perspectiva metropolitana. Las evidencias aportadas por el análisis socioeconómico no dejan duda alguna de que sólo un escenario de región urbana permite comprender el dinamismo del espacio definido por las entidades de población que giran en torno a Vigo y a Pontevedra. La creciente presión sobre el Puente de Rande, que, a pesar de su elevado coste, presenta ya un riesgo de colapso, es el mejor indicador de la interdependencia de estos núcleos y de la complementariedad de su dinamismo.

La articulación de esta nueva complejidad metropolitana requiere un planteamiento interdisciplinar y el empleo de modelos transaccionales de negociación. Nunca se insistirá bastante que, en contextos democráticos, la legitimidad social constituye un requisito crucial e ineludible para toda intervención. En sociedades periféricas, en las que el desarrollo es más bien inducido desde otras áreas más dinámicas y se produce de modo más irregular o brusco, la importación de tecnología no suele incluir este componente social, en el que tales sociedades arrastran precisamente un mayor retraso.

Esta restricción está en la raíz de la acumulación de tensiones no resueltas, que dan a aglomeraciones dinámicas como Vigo y con un deficiente equipamiento institucional público una imagen un tanto convulsa o crítica. Hace todavía pocos años, estas tensiones asumieron también en Pontevedra la expresión tradicional de una lucha por la capitalidad. La perspectiva metropolitana abre un nuevo horizonte y permite comprender las oportunidades que ofrece sustituir la lógica de la rivalidad, derivada del aislamiento local, por una alianza estratégica.

Ante esta situación, resulta urgente promover el encuentro entre los nodos centrales de la Región Urbana de las Rías Baixas: Vigo y Pontevedra. La promoción eficaz de este horizonte metropolitano requiere un planteamiento y una intervención innovadores, que responde a las exigencias de la sociedad terciaria y del conocimiento. Desde esta perspectiva, la complementariedad entre Vigo y Pontevedra ofrece un horizonte único en Galicia e incluso en la Eurorregión.

Abordar esta situación es, justamente, el propósito de las jornadas A Rexión Urbana das Rías Baixas, que se celebrarán los días 25 y 26 en el Club Financiero de Vigo y el 27 y 28 en el Centro Social de Caixanova en Pontevedra.

*Director técnico del Seminario Carlos Velasco y catedrático de Sociología de la USC