Parece que el acondicionamiento de la placita sobre la cubierta del pabellón de O Berbés, va. Con un retraso del copón, pero va. C´est à dire, que la podrán bendecir para las municipales, y no como lo de la Travesía, que aún tiene para largo.

Pero en lo de O Berbés, con sus placas solares, su parque infantil y todo, hay un par de cosas curiosas.

Faltaban cuatro losetas en la acera y sin ellas se quedó la pobrecita

Resulta que la remodelación de la plaza en cuestión incluyó una ampliación considerable de la zona de acceso, con ajardinamiento a ambos lados, para lo que se prolongó el pavimento de la plaza hasta el bordillo mismo de la acera.

Como había una parte deteriorada, la empresa encargada de las obras repuso un tramo de acera y tuvo el detalle de utilizar el mismo tipo de pavimento existente en el resto de la calle, que debe ser el más barato del mercado si es que aún se sigue fabricando.

Lo curioso es que tres pasos, contados, más arriba, la acera está fanada. Le faltan cuatro baldosines que no han tenido el detalle de reponer. Como no figuraba en el plan de obra...

Sin iluminación, los paneles solares durarán días y la plaza será un ghetto

Pero no acaban ahí las curiosidades de esta obra, tan cara, por cierto, pues el presupuesto ronda los 600.000 euros.

Y es que no hay iluminación. Al menos visible. Cuentan que el Concello se plantea estos días la posibilidad de instalar farolas -algunas quedarán en los depósitos municipales- o reflectores a prueba de pedradas

Y es que saben que a oscuras, los paneles solares tienen los días contados y que la plaza en cuestión se convertirá en un ghetto.

Y para eso compensaba dejarla como estaba, vallada y punto.