Esto si que es Abrir Vigo al Mar y no todo lo hecho hasta ahoraNi ventanas sobre la ría ni miradores a pie de playa ni delfines vegetales a punto de zambullida en la paellera del Areal. Para Abrir Vigo al mar de verdad, las obras del entorno de la alameda.Y si no que se lo digan a los cientos -miles- de ciudadanos que ayer se vieron con el agua a la altura de

Da en la diana la conselleira de Política Territorial cuando recuerda que en Iberia priman los criterios de mercado, y está por lo tanto en su derecho de suprimir vuelos. Como si inaugura una línea Móstoles-Sanchidrián. Pero lo que la asepsia neoliberal de Caride oculta es la coincidencia del recorte de la compañía aérea en Peinador con el de su plantilla en toda España y con el que los Presupuestos Generales del Estado asestan al aeropuerto vigués, demasiado obvia como para que la conselleira pueda pasarla por alto.

Como sospecha Caride, cuando una compañía aérea tiene problemas puede ajustar sus líneas. Ahí nada puede hacer la Xunta. Pero si una conselleira de Política Territorial quiere cumplir con sus obligaciones, deberá comprobar si el recorte está relacionado con el Plan Director 2006-2008, que la compañía aérea presentó ayer y con el que pretende ahorrar 600 millones de euros, y si ambas circunstancias acaso tendrán que ver con la asfixia presupuestaria que el Gobierno central somete a Peinador, demostrada en unas inversiones que en 2006 suponen la mitad que las de Alvedro o Lavacolla.

Por si tanta escrupulosidad de libre mercado se lo había ocultado a la conselleira, la ordenación del territorio y del transporte no corresponde a ninguna compañía privada, sino a la Administración para la que ella trabaja, por lo que deberá ser la Xunta quien oriente a Iberia dónde puede meter la tijera y dónde no. A no ser que ya lo haya hecho, y se intente presentar como una decisión privada la apuesta institucional por dos aeropuertos separados a veinte minutos de automóvil. Los presupuestos de 2006 dejan poco lugar a las dudas.

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