El Real Club Náutico de Vigo nombrará socio de honor, su máxima distinción para personas o entidades, a Nicolás Rodríguez García-Paz (Vigo, 1991), el primer regatista vigués que ha dado una medalla olímpica a la ciudad en vela. A efectos de estatutos de la sociedad, la junta directiva propondrá el nombre del medallista olímpico a la asamblea general para su aprobación.
Nico, como se le conoce en el Náutico, formado en los equipos de regatas del club desde la clase optimist, comenzó en la vela a bordo de un raquero, un barco escuela de diseño español, para monitor y un máximo de ocho alumnos, que permite la iniciación a este deporte.
“El bronce de Nico es un orgullo para el club porque él es la punta del iceberg: por debajo hay cientos de deportistas, monitores y entrenadores que se esfuerzan en el trabajo diario”, señaló José Antonio Portela, presidente del Real Club Náutico de Vigo. El dirigente vigués se mostró “feliz” por el podio del regatista en la clase 470 porque “es una gran persona, muy humilde y sencillo”.
Para la vela española, el tercer puesto en los Juegos de Tokio de Jordi Xammar y Nicolás Rodríguez en 470 supone la vigésima primera medalla a lo largo de la historia de los Juegos (desde la primera, que llegó en 1932), lo que convierte a este deporte en la disciplina más exitosa de todas las modalidades que la delegación española presenta en la cita olímpica.
El club olívico también celebró en Londres 2012 la medalla de oro de la ourensana Támara Echegoyen, formada igualmente en el Náutico.
Tras iniciarse en la escuela de vela a bordo del raquero, el siguiente paso natural de Rodríguez fue en la clase optimist, donde coincidió con los hermanos Jiménez (Andrés y Rafael eran mayores, fueron varias veces campeones mundiales júnior de Vaurien) y con Antonio Pérez, “Tone”, actual presidente de Asvaurien España. “Me alegro mucho por él”, dijo Tone, que, un año mayor que Nico, coincidió con él en optimist varios años. “Recuerdo que había una brecha de edad entre los Jiménez y un grupo de regatistas y nosotros dos, lo que llevó a que nos uniésemos mucho en los entrenamientos, que eran muy intensos. Fuera del agua éramos buenos amigos”, apuntaba Tone.
En optimist, Nico vivió sus primeras salidas a competiciones nacionales (Gijón, Las Palmas), pero también a las internacionales, pues compitió un par de años en el Meeting del Lago di Garda, en Italia, la más famosa prueba internacional de optimist, Europeos y Mundiales aparte. En optimist, Nico levantó su primer trofeo, el Campeonato de Galicia, tanto individual como por equipos con el Náutico (2006).
Tras su paso por el 420 (campeón de España en 2009 con Sergio Crespo, del Liceo Vilagarcía), el regatista del Náutico de Vigo empezó su carrera en una clase olímpica en 2013. Y con Jordi Xammar, desde 2018, ha cosechado tres metales mundialistas (bronce en Aarhus 2018 y Vilamoura 2021 y plata en Enoshima 2019), cinco podios en el circuito de la Copa del Mundo (oro en las citas de Miami 2019 y Miami 2020, plata en Marsella 2018 y 2019 y en Enoshima 2019) y tres metales en Europeos: Mónaco 2017 (bronce), San Remo 2019 (plata) y Vilamoura 2021 (bronce).
Cuando el 19 de marzo pasado firmó en el libro de honor del Real Club Náutico, escribió: “Para mí es un honor poder seguir compartiendo mi camino como regatista con el Real Club Náutico de Vigo. Son más de veinte años desde que navegué por primera vez en raquero en nuestra maravillosa ría de Vigo y hoy comparto con toda la gente que ha pasado a lo largo de estos 20 años los últimos pasos hasta los Juegos de Tokio, donde espero poder regalaros un éxito compartido con todos este verano de 2021”. Ha cumplido.
