"¡Lloré mucho durante la regata, pero ahora no se llora más, ahora a celebrarlo!". Esa fue la respuesta de Miguel Rodríguez, el hermano del laureado regatista vigués, cuando éste le pregunto si había visto la regata que le aupó al tercer cajón del podio en la mañana de este miércoles. Ya con el bronce colgado del cuello, Nicolás Rodríguez marcó desde Enoshima el número de teléfono de su hermano, mientras éste atendía a los micrófonos de la Televisión de Galicia, en Vigo. La conversación arrancó con el que, al parecer, es su grito de guerra habitual: ¡Lumeeeee!, se dijeron ambos hermanos.

La jornada fue intensa para los medallistas que disputaron una apasionante medal race en la clase 470, en la que la pareja española finalizó en quinto lugar, suficiente para proteger la tercera posición con la que arrancaban el día.

Barra libre de 'polbo á feira' para Gasol

Después de todo el ciclo olímpico en posiciones de podio en Mundiales y Europeos, los Juegos eran el colofón soñado para quienes han sido la mejor pareja de la clase solo por detrás de los australianos. Pero la regata estuvo muy ajustada con Nueva Zelanda pisando los talones de los regatistas españoles en este último día de competición, de ahí que la emoción saltase en forma de lágrimas cuando Nico comprobó que lo habían logrado. Y después de las lágrimas, llegaron la alegría, la euforia e infinidad de felicitaciones, algunas inesperadas para este vigués como la de Pau Gasol o Andrés Iniesta. El regatista gallego tiró de retranca cuando compartió en su instagram la historia del jugador de baloncesto, al que invitó a "Barra libre de polbo á feira en Vigo", y la del futbolista que marcó el gol de la victoria de España en el Mundial de 2010 al que prometió que celebrarían su medalla con los vinos de su bodega.

Las felicitaciones de Pau Gasol y Andrés Iniesta a la pareja de bronce formada por el vigués y el catalán que Nicolás Rodríguez respondió con retranca gallega.

La de Nicolás Rodríguez García-Paz ha sido la tercera medalla lograda por un vigués en unos Juegos Olímpicos, tras las conquistadas por el futbolista Moncho Gil en Amberes 1920 y la jugadora de balonmano Begoña Fernández en Londres 2012.