Este domingo Rosa López se sentaba a charlar con Jordi Évole. La cantante fue la última invitada de 'Lo de Évole', en un programa en el que se abrió en canal sobre su vida haciendo balance de su trayectoria en el mundo de la música y hablando como nunca, del alto precio que pagó por su brutal ascenso a la fama. Y es que sin duda, convertirse en la ganadora de la primera edición de 'Operación Triunfo' le cambió la vida pero también le dejó unas secuelas que todavía colean.

Se sinceró como nunca sobre su duro paso por el concurso que, también la convirtió en la representante de España en Eurovisión. Una experiencia que recuerda con mucha presión. "Sentía que España creía que seguro que íbamos a ganar. Como el fútbol, que se les desencaja la cara… Y yo no puedo decepcionar”, expresaba Rosa López transmitiendo el sufrimiento que supuso lo que el público esperaba de ella en el Festival.

Una desgarradora confesión que dejó muy sorprendida a Rigoberta Bandini, una de las candidatas para representar a nuestro país en Turín en el festival de Eurovisión que se celebrará el próximo mes de Mayo.

La cantante catalana tuvo una pequeña aparición en el programa en el que, a modo de sketch, aparecía sentada en un camerino mientras veía la entrevista de Rosa López. Escuchaba la reflexión sobre la presión que sintió por parte del público en su participación en Eurovisión 2002 y mandaba un mensaje a la audiencia: "Madre mía de la que me he librado. Muchas gracias jurado".

 Rigoberta Bandini quedó en segunda posición del 'Benidorm Fest', un certamen que levantó mucha polémica y en el que no consiguió hacerse con la victoria, en parte, por la decisión del jurado profesional.