Aunque el Benidorm Fest haya traído cola por los polémicos resultados, con la victoria de Chanel aupada por el jurado, no hay nada que se le parezca a la preselección de Eurovisión de 2017. En una de aquellas galas ajustadas de presupuesto y con canciones poco competitivas que organizaba TVE, Manel Navarro ganó a la favorita Mirela. El joven acabó yendo al festival con 'Do it for your lover' gracias a los votos del jurado, entre ellos de Xavi Martínez.

Ayer 'Horizonte' trajo a su plató al locutor, que afirmó que no se reconocía cuando ve imágenes de esa gala: "Yo me doy vergüenza". "Era otra persona, incluso el lenguaje no verbal", expresó Martínez, que aseguró sentir en aquel momento "miedo" y la "inseguridad". "La semana antes de llegar a ese plató había tenido amenazas en redes sociales por poner la canción de uno de los candidatos en la radio", explicaba.

"Yo me debía a una cadena y yo no soy nadie para decirle al director de mi emisora de radio: 'No voy a presentar esa canción que vosotros habéis decidido programar en rotación cada día'", le explicó a Iker Jiménez.

Sin embargo, lo peor llegó la noche de la gala, cuando Martínez tuvo que abandonar el plató porque "solo escuchaba amenazas de muerte". "No me lo veo venir, me vienen cuatro y me llevo un guantazo", recordó. "Más que el puñetazo ese, me dolió mucho más la palabra 'tongo'", reveló.