Se dio a conocer hace casi diez años en 'realitiy' de MTV España, "Gandía Shore", donde compartió más que palabras con la también popular Ylenia. Se trata de José Labrador, quien aprovecharía su tirón mediático para participar en otros programas, esta vez de Telecinco, como 'Mujeres y Hombres y Viceversa', 'Supervivientes' o 'La Caja Fuerte'.

Lo cierto es que el valenciano siempre ha mostrado su lado más canalla en sus apariciones televisivas, por eso la escena que este lunes subía a las stories de su perfil de Instagram no debería sorprender a nadie, aunque esta vez, ha cruzado los límites.

Al parecer, volvía del trabajo en su coche por la autovía, hacia su casa, después de "una noche movidita", -así lo contaba en la grabación que hizo con su movil, cuando estaba conduciendo-, y llevaba consigo una "pieza de coleccionista" que quiso mostrar a sus más de 225.000 seguidores de esa red social.

El objeto en cuestión era una taza de "Jurasic World", insertada en una caja de cartón a la que Labrador aludió como "su favorita". Pues bien, después de contar las excelencias de esta pieza de cerámica, "que nunca he sacado de su caja", por fin la extrae del recipiente, la muestra a la cámara del móvil, baja la ventanilla, y la tira a la autovía sin ni siquiera inmutarse. "¡Ups!, se cayó por la ventana. No os preocupéis, gente, no pasa nada. No pasa nada. ¡Me la regaló mi ex, jajaja!", comentó tras su imprudente acción.

Tira la caja al contenedor de cartón

Lo más paradójico, es que una vez llegó a su destino, y "como buen cuidador del medio ambiente", depositó la caja donde iba insertada la taza en su contenedor correspondiente: "Venga, ahí es donde tiene que estar, ¿veis?. Aunque bueno, hubiera sido mejor tirarlo en este, en el de la mierda", ironizó refiriéndose al hecho de que se trataba de un regalo de su exnovia con la que parece no tener una relación muy cordial, en vista del desprecio que muestra por sus recuerdos.

Terminada la "gracia", la escena en sus 'stories' concluía con Labrador subiendo en el ascensor, mostrando su musculatura ante el espejo, y lleno de orgullo por su 'buena' acción de este Día de Todos los Santos, cosa de la que él no debería presumir. Así nadie se gana el cielo.