Belén Esteban, como colaboradora de Sálvame, tuvo que posicionarse en un bando cuando se emitió el primer episodio del documental de Rocío Carrasco, pero su determinación se licúa a medida que avanzan los acontecimientos.
La colaboradora no dudó en defender a su amiga, Rocío Flores, antes de ver la entrevista de La Fábrica de la Tele a su madre. Se conocieron en 2019 cuando la nieta de Rocío Jurado dio el salto a la televisión como defensora de su padre en Gran Hermano VIP 7 y se consolidó con el fichaje de la hija de Antonio David en Supervivientes y se convirtió en un rostro habitual de Telecinco.
La simpatía por los Flores unió a la princesa del pueblo con Olga Moreno, con quien también entabló una estrecha relación.
Pero la rotundidad con la que Esteban defendió la inocencia de sus amigas duró un episodio de la trama y se convirtió en la primera persona en darles la espalda y disculparse con Carrasco por haberle llamado "mala madre".
La amistad entre Belén Esteban y Rocío Flores
Uno de los vínculos de la colaboradora de Sálvame y la nieta de Rocío Jurado fue Agustín Ettiene, el antiguo socio de Toño Sanchís que y representante de ambas.
Como anécdota cabe destacar que el manager es el hombre que empujó a David Flores contra Olga Moreno.
Ahora, tal y como avanza Saul Ortiz en el diario ABC, Belén Esteban decidió prescindir de él y autogestionarse con la ayuda de su marido y personas de su total confianza.
Desde entonces, la colaboradora tomó decisiones empresariales de calado como dar un salto empresarial y lanzar al mercado su gazpacho y su salmorejo.
No quiere que ninguna figura la una a Rocío Flores ni que cambie su parecer al respecto del conflicto entre madre e hija y opta por expulsar de su vida a las personas que pueden provocar una unión entre ambas.
