Las últimas apariciones de Adele nos han dejado boquiabiertos desde las pasadas navidades. En mayo compartió una foto por su cumpleaños en la que se apreciaba una notable pérdida de peso. Y así ha seguido. La artista está irreconocible. A sus 32 años, la intérprete de "Hello" luce una figura que nada tiene que ver con la de sus vídeos y sus añoradas actuaciones, rellenita y soltando parrafadas y tacos entre canción y canción.

La "culpable" del cambio físico ha sido la dieta sirtfood, con la que la británica ha logrado perder más de 45 kilos. Este régimen está basado en el consumo de alimentos ricos en unas proteínas llamadas sirtuinas o bien en aquellos que las activen. Las manzanas, los arándanos y el té verde las contienen. El vino tinto y el chocolate negro (con un 85% de cacao), también, por lo que están recomendados en esta dieta.

Este régimen restrictivo e hipocalórico tiene tantos adeptos como detractores, ya que permite perder mucho peso en poco tiempo. Se divide en tres fases: la primera dura tres días, es la más severa y se limita a una ingesta diaria de tan solo 1.000 calorías; la segunda es la más larga y el número de calorías asciende a 1.500 y, la tercera, de mantenimiento, permite hasta 1.800 y ciertos caprichos.

El plan dietético, al que muchos nutricionistas consideran otra dieta milagro y alertan del posible efecto rebote, sin embargo, le ha resultado útil. Pero no solo ha sido cuestión de báscula. La ganadora de 15 premios Grammy ha cambiado radicalmente de look: ha ido aclarando el tono de su cabello y ahora luce una larga melena rubia y rizada.

En una reciente foto publicada en su Instagram, posaba con un biquini con los colores jamaicanos y con el pelo a lo afro para homenajear desde la distancia el Carnaval de Notting Hill, en Londres, que no pudo celebrarse por la pandemia. La foto, que supera los 5 millones de likes, con apropiación cultural o no, evidenciaba otra Adele. Una transformación que ha venido acompañada de deporte. Un entrenador personal y una rutina diaria de fitness y actividad física han contribuido a la metamorfosis.

Comienza a vivir

También lo ha hecho "Untamed: Stop pleasing, start living" (Indomable, deja de complacer, comienza a vivir, traducido), un manual de autoayuda que habla de la alegría que sentimos cuando dejamos de esforzarnos por satisfacer las expectativas ajenas y nos centramos en nosotros mismos. "Este libro os sacudirá el cerebro y conseguirá que vuestra alma grite", escribía en Instagram la propia Adele, que lo recomendaba "a cualquiera que tenga la capacidad de dejarse llevar y rendirse ante sí mismo con el único objetivo de aferrarse a la vida. Leedlo, vividlo y practicadlo".

La transformación ha ido en paralelo a lo experimentado a nivel personal, tras divorciarse del empresario Simon Konecki, el padre de su único hijo, Angelo, de 8 años. El divorcio millonario -se repartieron 171 millones de euros- se materializó el pasado abril.

La artista afronta una nueva etapa personal y profesional con nuevos proyectos. El más inmediato es su cuarto álbum de estudio, un disco que iba a lanzar en septiembre de este año, pero que ha tenido que aplazar por la crisis mundial del covid-19. ¿Cuándo se publicará? "Sinceramente, no tengo ni idea", respondió Adele hace unos días a uno de sus seguidores, que le había preguntado al respecto en Instagram. Sería el sucesor de "25", publicado hace casi cinco años. Lo que se sabe es que tendrá claras referencias soul e incorporará un sonido más ecléctico. La duda que flota es si su voz continuará siendo la misma que encandiló al mundo en el 2008 con 19.