Zoar está compuesto por cinco músicos; flauta: Joan Ibáñez, coprincipal de la Sinfónica de Galicia; oboe: David Villa, principal asistente de la Sinfónica de Galicia; clarinete: Antonio Suárez, profesor del Conservatorio de Culleredo; trompa: Benjamín Iglesias, profesor del Conservatorio Profesional de A Coruña; y fagot: Álex Salgueiro, coprincipal de la Sinfónica de Galicia.

Conjunto de cámara estable y activo formado en 2009. Creció buscando un estilo propio definido por la originalidad de sus proyectos, un firme compromiso con la nueva creación, la colaboración con otros artistas y la realización de proyectos pedagógicos de calidad con la voluntad de acercar su actividad a todos los públicos. Entre las colaboraciones con otros artistas cabe destacar proyectos con la compañía de títeres Os Monicreques de Kukas, con el escritor Manuel Rivas o el beatboxer Carlos Vidal 'Lytos' en el proyecto Windbox. En el 2014 fueron invitados como solistas a la Orquesta Gaos y en 2015 al VintEnsemble. El interés por el repertorio desconocido, la recuperación del patrimonio musical olvidado y el compromiso con la nueva creación llevó al conjunto a explorar más allá del repertorio tradicional de la música para conjuntos de vientos y a incorporar obras de compositores olvidados o estrenos de obras ya escritas pero nunca interpretadas.

Esta temporada no habrá pausa en los conciertos, siguiendo las recomendaciones de la INAEM para garantizar la seguridad de público e intérpretes, además de otras medidas concretas en nuestros auditorios, que puedes leer abajo.

PROGRAMA

Duración aprox. 1 h

ROBERT SCHUMANN

Escenas infantiles, op. 15

I.De extraños países y gentes

II. Una historia curiosa

III. La gallina ciega

IV. Súplica infantil

V. Suficientemente feliz

VI. Un acontecimiento importante

VII. Ensoñación

VIII. Junto al fuego

IX. Caballero en caballito de madera

X. Demasiado serio

XI. Espantoso

XII. Niño adormilado

XIII. El poeta habla

(Adaptación de Hans Abrahamsen)

GEORGES BIZET

Juegos de niños, op. 22

I. El columpio

II. La peonza

III. La muñeca

IV. Los caballitos de madera

V. El volante

VI. Trompeta y tambor

VII. Pompas de jabón

VIII. Las cuatro esquinas

IX. La gallina ciega

X. Saltar al potro

XI. Papás y mamás

XII. El baile

(Adaptación de Heribert Breuer y

Sergio Rodríguez)

NOTAS AL PROGRAMA

ROBERT SCHUMANN (1810 - 1876)

Escenas infantiles, op. 15

Se ha escrito mucho sobre la relación de Robert Schumann con Clara Wieck. En la primavera de 1838, la joven pianista, con la firme oposición de su padre, ya estaba prometida con el compositor alemán y se encontraba realizando una gira de conciertos. Las profundas saudades que sentía Schumann lo llevaron a escribir una treintena de pequeñas piezas. En una carta dirigida a su novia, afirmó que quizás fueran "un eco de lo que me dijiste una vez, que a veces parecía un niño", pero que no eran "ejercicios pedagógicos para dedos pequeños, sino más bien viñetas expresivas y adultas de recuerdos y reflejos de la infancia". Este último hecho ya marca una diferencia entre su Álbum para la juventud (1848) y las Kinderszenen, que fue la obra que surgió de la selección de trece de las citadas piezas. A cada una de ellas le asignó un título, que según el autor no pretendía más que ser un consejo para la interpretación. La primera de las escenas, De tierras y pueblos lejanos, se abre con una hermosa melodía con un eje que aparecerá en muchas de las piezas siguientes, sirviendo como nexo de unión. A lo largo de la obra se van encontrando motivos llenos de fantasía y delicadeza (como en Niño mimado o en Niño adormilado) y otros que sugieren felicidad (Suficientemente feliz), tranquilidad (Junto al fuego), seriedad (Demasiado serio), agitación festiva (Caballero del caballito de madera) o misterio (Espantoso). La séptima es, sin duda, la más famosa del ciclo y una de las más conocidas de toda la producción pianística de Schumann, se titula Ensoñación y se articula en torno a una melodía sencilla, pero llena de tranquilidad y belleza. La última, El poeta habla, supone un contraste con todo lo escuchado hasta entonces al afrontar la visión externa de un narrador adulto, distante al mismo tiempo que cercana y llena de ternura mientras contempla la infancia como un paraíso perdido. Refleja perfectamente lo que afirmó el gran pianista Alfred Cortot al referirse a esta obra: "se necesita soñar esta pieza antes de tocarla".

GEORGES BIZET (1838 - 1875)

Juegos de niños, op. 22

A pesar de que Bizet fue reconocido como un pianista notable, nunca tuvo interés en desarrollar una carrera solista ni tampoco en escribir demasiadas obras para su instrumento. El período de disturbios que sucedió a la constitución de la Comuna de París en 1871 llevó a que el compositor y su mujer, Geneviève, abandonaran la capital durante unos meses. Poco después, en otoño, el matrimonio supo que iban a ser padres de un niño, Jacques, que nacería el 10 de junio de 1872. La feliz noticia le llevó a escribir una obra inspirada en la infancia: Jeux d' enfants. Se trataba de una suite de diez piezas para piano a cuatro manos a la que añadió otras dos antes de la publicación, y que luego fueron transcritas para orquesta. Bizet era un admirador de la música alemana y de la de Robert Schumann, pero, a diferencia de las Escenas infantiles de éste, no quiso idealizar la infancia ni sus anhelos, sino simplemente evocar los juegos y el ocio de niños y niñas.

Las doce piezas destacan por su ingenio, vivacidad y encanto. La primera es El columpio, lenta y elegante con sus arpegios. Luego llega La peonza, con un acompañamiento giratorio a un tema ligero, La muñeca, una dulce canción de cuna, Los caballitos de madera, a modo de marcha, El volante, con motivos ascendentes y descendentes que recuerdan a los movimientos de una pluma de bádminton. Trompeta y tambor es otra marcha, esta vez para soldados de lata, Pompas de jabón es una pieza saltarina como las burbujas que estallan en el aire, Las cuatro esquinas recrea las carreras de los niños mientras juegan. La gallina ciega, con su aire vacilante, contrasta con Saltar al potro, vigoroso y juguetón. El momento más tierno llega con la ingenuidad de los juegos de familia de Papás y mamás, finalizando la suite con un galop efervescente, El baile.

Sociedad Filarmónica de Vigo – Martín Fernández

MEDIDAS COVID-19

1-Uso obligatorio de mascarilla en todo el recinto y durante la duración íntegra del espectáculo.

2.-Desinfección obligatoria de manos al acceder al recinto.

3.-No podrá cambiar la butaca asignada en la compra con otro espectador en ningún momento.

4.-En el acceso y salida a su zona asignada deberá efectuarse siguiendo las instrucciones del personal de la sala para evitar aglomeraciones.

5.-El uso de ascensores queda limitado a personas con movilidad reducida, priorizándose el uso de las escaleras.

6.-Si usted presenta síntomas compatibles con la COVID-19 o ha estado en contacto con caso confirmado en los últimos 14 días, por favor, no acceda a nuestro centro, aíslese en su domicilio y contacte con su centro de salud más próximo.